En su Rendición de Cuentas 2025, Emcali presentó un balance centrado en modernización de infraestructura, continuidad del servicio y recuperación financiera. El gerente general, Roger Mina Carbonero, destacó la instalación de más de 55.000 luminarias modernizadas, equivalentes al 30 % del alumbrado público de la ciudad, como parte de la fase inicial del plan de actualización del sistema. También anunció que el próximo año se intensificará la reposición de redes antiguas, especialmente en sectores donde las tuberías superan los 30 y 40 años de uso, una condición que limita la recuperación de la malla vial.
La gerencia insistió en que la transformación requiere continuidad técnica y presupuestal, ya que en varios barrios el deterioro acumulado obliga a priorizar inversiones que garanticen calidad en agua, energía y telecomunicaciones. “La ciudadanía exige soluciones y estaremos ampliando la capacidad operativa para atender estos rezagos históricos”, afirmó Mina.
Avances en agua potable y alcantarillado
La Unidad de Acueducto y Alcantarillado, dirigida por Marco León Villegas Velázquez, informó la recuperación de 28,7 kilómetros de redes, de los cuales 20,7 corresponden a acueducto y 8 a alcantarillado. Las intervenciones impactaron sectores de las comunas 18, 20 y 1, mientras que continúan obras activas en las comunas 2, 9, 10, 12, 16, 17 y 19, zonas priorizadas por sus rezagos en renovación y mantenimiento.
Uno de los proyectos más significativos se ejecutó en el corredor Cali–Jamundí y la comuna 22, especialmente en Bochalema, donde se instalaron bombas que incrementaron el caudal de 30 a 100 metros cúbicos por segundo. Este refuerzo estabiliza el suministro para más de 32.000 usuarios. La obra se complementa con una inversión de más de 26.000 millones de pesos en la Planta La Rivera, orientada a fortalecer su capacidad operativa.
El gerente Villegas resaltó también la incorporación de tres Vactor de última generación, equipos que optimizan la limpieza de sumideros, el despeje de canales y la atención ante emergencias por lluvias intensas o taponamientos. Según explicó, estos vehículos disminuyen los tiempos de respuesta y fortalecen las acciones de prevención durante el invierno
Confiabilidad energética y recuperación
En el componente de energía, el gerente José David Insuasti Avendaño reportó inversiones superiores a 35 mil millones de pesos en la instalación de cable ecológico, una acción clave para fortalecer la confiabilidad del servicio. A esto se suman 375 mil millones de pesos destinados a la modernización de cinco subestaciones con rezagos estructurales, y los 1860 hogares con paneles solares en sectores como Potrero Grande y Llano Verde, y otros 1000 más que se sumarán, priorizando comedores comunitarios con apoyo del Gobierno Nacional.
Insuasti confirmó que la nueva subestación de Arroyohondo ya se encuentra en operación, mientras que la subestación de Mulaló, en Yumbo, entrará en etapa de construcción el próximo año.
Estas intervenciones buscan reducir interrupciones asociadas a lluvias, sobrecargas o fallas técnicas, además de preparar la red eléctrica para la expansión urbana prevista en los próximos años. El uso de cable semi aislado o ecológico disminuye el riesgo de cortes por contacto con ramas, humedad o cortocircuitos, lo que mejora la estabilidad del sistema eléctrico.
Por su parte, la Unidad de Telecomunicaciones, liderada por Roberto Carlos Angulo Jiménez, expuso avances en la reducción del déficit histórico del negocio, que superó el billón de pesos en la última década. La actual administración asumió pérdidas cercanas a 160.000 millones y proyecta cerrar 2025 alrededor de 89.000 millones, gracias a estrategias de eficiencia y control de gastos. Señaló que la meta para 2025 fue reducir más de 50.000 millones en pérdidas y avanzar hacia el punto de equilibrio entre 2027 y 2028.
Aunque las cifras reflejan un año de ejecución activa, Mina hizo énfasis en que persisten desafíos en renovación de redes, continuidad de obras y recuperación del sistema de telecomunicación. Subrayó que el seguimiento ciudadano será determinante para que las inversiones cumplan con los cronogramas y generen el impacto esperado por las autoridades y los usuarios en los niveles de servicio.