ebastián Carvajal vive uno de los mejores momentos de su carrera al protagonizar dos series, ‘remakes’ de producciones colombianas de los años noventa, líderes en donde se están emitiendo, y está listo para dar el salto a Hollywood.

Por un lado, de lunes a viernes a las 9:30 p.m., los televidentes lo ven en el Canal RCN en la serie ‘Ana de Nadie’, junto a Paola Turbay, siendo una nueva versión de la famosa historia de Bernardo Romero Pereiro, ‘Señora Isabel’.

Además, sigue siendo tendencia en la plataforma de streaming Prime Video ‘Manes’, que es el remake de la serie ‘Hombres’, estelarizada en los noventa por Margarita Rosa de Francisco.
Un momento estelar para el joven actor colombiano, quien no para de trabajar y está listo para dar la sorpresa en el competido mundo de Hollywood.

¿Por qué aceptó el rol de ‘Ana de Nadie’?

Es una historia muy bonita sobre un amor imposible que al final se da. Es un carrusel emocional, una montaña rusa de problemas, de momentos tristes, de momentos alegres. Hablamos de cómo una persona menor puede conquistar a una mujer mayor con todo el mundo de problemas que tiene. El trasfondo de esta historia es cómo una mujer mayor puede volver a sentirse amada, deseada, alegre y feliz con su vida. ‘Ana de Nadie’ es puro empoderamiento femenino.

¿Quién es Joaquín Cortés, su personaje en la historia?

Es un soñador, que está lleno de muchos problemas, pero lo que lo hace enaltecer es que siempre está en búsqueda de lograr encontrar salidas, pese a que siente que siempre se le cierran las puertas, pero busca la forma de seguir ejerciendo el periodismo que es lo que le apasiona. Creo que es un personaje muy romántico y eso está gustando mucho.

¿Cómo es la historia entre Ana y Joaquín?

Se encuentran en un momento no tan fácil. Engañado por quien era su esposa, se quedó sin trabajo, y se involucra con una mujer de un estrato más alto y 15 años más. Todo está en su contra, pero lo bonito de un personaje como Joaquín, es cómo lograr darle el giro a su mundo, seguir luchando por sus sueños.

¿Cuál fue su reacción al conocer el proyecto?

Cuando me hablaron de ‘Ana de nadie’ sentí que se venía una responsabilidad muy linda de demostrar que el amor no tiene edad ni estrato social. Que la vida sigue más allá de los números. Joaquín llega a la vida de Ana para darle color, tras unos años muy oscuros y difíciles.
Creo que es tan honesta como actual, se siguen viviendo situaciones similares hoy en día, con los problemas de una familia de hoy.

Interpreta a un periodista investigador…

Fueron muchos meses de trabajo para llegar a ser un buen periodista, enfocado en hacer bien su trabajo, con la responsabilidad de velar por un hijo, yo no tengo hijos, así que debí trabajar mucho más esa parte. Son cosas muy reales, el rol del padre, cuando no tienes dinero, pero eres responsable y debes responder, además de querer a una mujer seis estratos más arriba que tú. Como actores debemos transmitir un mundo de sensaciones y emociones que vive cualquier ser humano.

¿Cuál fue el mayor reto?

El gran reto es la credibilidad en la historia, lo que Joaquín, 15 años menor de Ana, debe demostrar todo lo que le puede dar a ella, para que vuelva a creer en el amor. Tuve muchas charlas con mi madre, quien tuvo una relación con un hombre menor que ella, por lo que me contó muchos detalles que me ayudaron para crear a Joaquín.
Lo que podemos aprender de una historia así es a ser honestos, porque terminas haciendo mucho daño a quienes amas si no lo haces.


¿Cómo es su labor de interpretar tan distintos personajes?

Siempre pienso en el guion. Cuando llega un proyecto lo leo, lo analizo para ir entrando en el personaje, conociendo sus bases y así logro que cada rol sea diferente, porque todo ser humano es un universo diferente.
Lo bueno en este momento es que tengo un papel en una comedia como ‘Manes’, y a la vez, la gente me puede ver en un drama como ‘Ana de nadie’, por lo que pueden notar bien las diferencias entre ambos mundos.