Una manada de jóvenes está a cargo de una rehén y una vaca lechera.  Cuando su misión se ve amenazada, comienza un viaje que pondrá en riesgo el orden establecido y su hermandad. Sobrevivir es un juego salvaje.

Esta es la historia de 'Monos', la cinta que se estrenará en salas de cine del país en los próximos meses y que participa en la categoría Ficciones, del Festival de Cine de Cartagena.

Supervivencia es quizá la palabra clave en esta producción dirigida por el colombiano Alejandro Landes Echavarría y con un guion cargado de adrenalina, escrito a cuatro manos con Alexis Dos Santos, en la que el espectador no termina de decidir por quién tomar partido, pues entre los buenos y los malos hay una gran paleta de grises.

Lo primero que hay que decir es que los escenarios elegidos nunca antes habían sido vistos en la pantalla grande por las duras condiciones geográficas que implica rodar allí: el Páramo de Chingaza, a 4000 metros de altura, en el que hasta respirar es una aventura; y el Río Samaná y las montañas que lo rodean, a cinco horas de Medellín, donde el equipo técnico y de actores descubrieron lo que es “estar a merced de la naturaleza”.

Este es el caso del fotógrafo Peter Zuccarini, quien participó en ‘Piratas del Caribe’ y ‘La vida de Pi’. “Sabíamos que no podíamos pagar lo que él cobraba por día, pero le encantó el guion y aceptó venir a Colombia y nos regaló su tiempo y sus juguetes. Fue increíble tenerlo ahí, esas escenas bajo el agua son muy impresionantes y no creo que lo pudiéramos haber hecho sin él, fue un gran privilegio”, afirma el director.

Con nueve semanas de rodaje y con un elenco que combina experimentados actores como la estadounidense Julianne Nicholson (Yo, Tonya) y el colombiano Moisés Arias, con un grupo de adolescentes actores naturales de diferentes zonas del país, temas de conversación son los que sobran con el director Alejandro Landes.

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¿Cómo describe 'Monos'?

Es una película de aventura. Por un lado, de descubrimiento, de adolescencia, de hermandad. ‘Quiero irme con mis amigos a un lugar remoto y que nadie me diga qué hacer’. Por el otro, es una cinta que apela a preguntas como: quiénes somos, quiénes queremos ser, hacia dónde queremos ir y qué estamos dispuestos a hacer para alcanzarlo.

¿Qué tipo de cine inspiró una película como 'Monos'?
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Monos es un poco ‘El señor de las moscas’, que sucede en el trasfondo de la novela inglesa de la Primera Guerra Mundial; también es un poco ‘El corazón de las tinieblas’ que sucede en el Congo y que luego sirve de fuente de inspiración para la película ‘Apocalypse Now, de Coppola.

Del grupo de adolescentes que vemos en 'Monos', solo Moisés Arias tiene experiencia actoral. ¿Cómo logró llevar a estos actores naturales al punto tan alto que alcanzaron frente a las cámaras?
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En Colombia no hay una gran industria de chicos actores, así que buscamos en colegios, escuelas de teatro y mirando rostros mientras estábamos ubicando locaciones, aunque también teníamos un agente de casting en Hollywood, de tal forma que la gama de búsqueda fue bastante amplia. Al final nos decidimos por 30 chicos de todo el
país y con ellos creamos una especie de campamento básico a unas horas de Bogotá.

En las mañanas tomaban clases de actuación e improvisación con la actriz argentina Inés Efrón y por las tardes entrenamiento de formación militar con Wilson Salazar, un excombatiente reinsertado y quien también tiene un papel importante en la película. Como nunca se trató de encontrar personajes individuales, porque finalmente los Monos funcionan como una hermandad, como una manada que es la protagonista de la historia, observamos detenidamente la dinámica que había entre ellos, los bandos que se formaban dentro de esta “minisociedad”. De allí salieron los ocho Monos.

Por lo que se percibe en pantalla, el rodaje no debió ser nada fácil. ¿Hay alguna escena que recuerde por su grado de dificultad?
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Realmente todas, pero si algo recuerdo es que me sacaron en camilla de la selva. El médico me dijo que tenía apendicitis y que en dos horas mi apéndice estallaría, así que un grupo de mineros me llevó hasta un hospital de la zona. De solo ver las condiciones del hospital me puse bien.

También me aterraba pensar que nunca más lograríamos tener a toda esa gente en ese cañón selvático, donde habíamos construido un campamento militar y a donde llegamos haciendo rafting y llevando los equipos y los alimentos a lomo de mula. Todos los que estuvimos allí conocimos nuestros límites físicos e intelectuales.

Ya que hablamos de límites, en términos de cine, ¿cuáles son los suyos?

No me gustan los límites, a mí me emociona mucho este idioma, este lenguaje que venimos hablando desde que nos inventamos el cine. Me interesa, justamente, hacer películas que rompen barreras. Monos, en sí, no respeta las reglas cinematográficas comunes y más bien intenta innovar, intenta buscar, intenta provocar otro tipo de emociones en el espectador, no solo por la temática que trata, sino por la manera en que se cuenta.

En esta película vemos que la violencia es escalofriante, que hasta el mismo ejecutor de la violencia se ve afectado. Es un espejo que nos hace preguntarnos quiénes somos y que rompe los límites con la fuerza de la razón, con preguntas. Yo no tengo la respuesta para temas tan complejos como este pero me parece que, como artista, es mi deber formar parte de la conversación que se está dando en el mundo sobre la violencia.

Lo que dice la crítica

“Este abrumador, tenso e inquietante thriller del director Alejandro Landes es lo mejor que he visto en Berlín en este año: es una mezcla entre Apocalipsis Now, El señor de las moscas y El Abrazo de la Serpiente”: Peter Bradshaw - The Guardian.

“Me encantó Monos. Que aventura. No tenía expectativas y me asombró con su producción, las imágenes son hermosas. Mica Levi (banda sonora) fue un elemento increíble al igual que las actuaciones. Es una experiencia poderosa, sensorial y llena de texturas. Es como si Peter Pan y los niños perdidos llegarán a Apocalypse now”: Carlos Aguilar - Movie Maker magazine.

“Monos demuestra un talento cinematográfico aparentemente
ilimitado. Landes no sigue ninguna regla de realización de películas aquí, pero está completamente en control mientras conduce a 200 mph.”: Chris O’Falt - Indiewire.

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