En los últimos años, miles de venezolanos que se han establecido en la ciudad de Bogotá, han encontrado infinitas dificultades para encontrar un lugar para vivir y por ende conseguir el dinero que les permita sustentar sus gastos básicos de manutención.
Debido a esta precaria situación, el Gobierno Nacional ha establecido y otorgado ayudas a la población migrante, que pese a todo han resultado insuficientes para cubrirlos a todos. Precisamente son estas situaciones las que habrían propiciado que un buen número de venezolanos hayan salido del país en los últimos meses.
Sin embargo, aún es una cifra importante la que sigue residiendo en la capital de la república y, por tanto, Probogotá Región y el programa Íntegra de Usaid lideran un modelo de solución de vivienda, que plantea “una solución integral mediante la combinación estratégica de subsidios de renta y programas de educación financiera para aliviar la presión inmediata sobre los hogares de migrantes venezolanos y empoderar a los beneficiarios locales y migrantes”.
Así las cosas, en el documento ‘Vivienda en renta, modelo replicable enfocado en la población migrante en Bogotá y Soacha’, elaborado por Probogotá, “propone subsidios de renta y programas de educación financiera para los integrantes de hogares de migrantes venezolanos, con el fin de empoderar a los beneficiarios locales y migrantes”.
“La propuesta busca que estas personas adquieran la capacidad de sostenerse financieramente sin depender de la asistencia. No se busca una ayuda vitalicia, sino una intervención limitada en el tiempo que les permita superar la pobreza”, afirma Probogotá.
La iniciativa arrancaría con un piloto del modelo de vivienda en renta replicable, del que se beneficiarían inicialmente 900 hogares, para impactar a más de 2.700 personas. Cifras basadas en los estudios realizados, dado el tamaño promedio arrojado por los estudios hechos, los beneficios se entregarían mitad para hogares colombianos y mitad para venezolanos.
El proyecto pretende construir torres de apartamentos, ubicadas en Bogotá o Soacha, de 300 unidades de vivienda de 42 metros cuadrados cuadraros, que estarán distribuidos en espacios de integración, buenos acabados y pensadas exclusivamente para ser rentadas.
“Los esfuerzos por garantizar la vivienda digna en Colombia deben ser un trabajo permanente y constante. En este proyecto se cuenta con un nivel importante de avance; no obstante, el éxito de la iniciativa estará sujeta a la continuación del proyecto piloto. Además de las recomendaciones realizadas a lo largo del documento, para el cronograma de ejecución del proyecto, el siguiente paso es la formulación de la estructura de capital para financiarlo y la búsqueda de los inversionistas para el mismo”, afirman desde Probogotá Región.