Tesla hizo oficial su llegada a Colombia con el anuncio de los precios, modelos disponibles y los primeros puntos de experiencia en Bogotá y Medellín. El lanzamiento, realizado este 20 de noviembre, marca un momento decisivo para el mercado automotor nacional, que avanza hacia la adopción de tecnologías de movilidad eléctrica.
La presentación estuvo encabezada por Karen Scarpetta, Country Manager de Tesla en Colombia, quien explicó que los valores fijados para el país buscan facilitar el acceso de más familias a vehículos eléctricos de alto desempeño. Según la ejecutiva, la estrategia de entrada combina oferta competitiva, infraestructura de carga y servicio directo.
El fabricante inicia operaciones con dos de sus referencias más conocidas, el sedán Model 3 y la camioneta Model Y. El Model 3 llega en tres versiones con precios desde $109.990.000, mientras que el Model Y parte desde $119.990.000.
Ambos estarán disponibles sin intermediarios, ya que Tesla operará bajo un modelo de negocio directo desde la venta hasta la asistencia técnica.
Las primeras tiendas estarán ubicadas en el Centro Andino, en Bogotá, y en el Centro Comercial El Tesoro, en Medellín. Allí los usuarios podrán conocer las características de los vehículos y recibir acompañamiento especializado antes de la compra. Todos los modelos que ingresen al país serán completamente importados desde las plantas globales de la compañía.
Uno de los aspectos resaltados por la marca es la autonomía, un factor determinante para los conductores en un país con geografía diversa. De acuerdo con Tesla, las versiones disponibles ofrecen entre 460 y 660 kilómetros por carga, dependiendo de las condiciones del trayecto.
A esto se suma una garantía de más de ocho años para las baterías, un elemento destacado para quienes evalúan el costo a largo plazo.
Junto con los vehículos, Tesla presentó una estrategia de infraestructura que incluye la instalación de sus primeras estaciones de supercarga en Bogotá y Medellín. Estas estarán operativas a comienzos del próximo año, coincidiendo con las primeras entregas.
El sistema de carga rápida utiliza corriente continua, lo que reduce los tiempos de recarga y da soporte a desplazamientos urbanos e interurbanos.
Además, los vehículos serán compatibles con cargadores tipo 2 y accesorios como conectores móviles o de uso doméstico, lo que permitirá realizar recargas en parqueaderos residenciales o en el hogar.
La compañía asegura que su ecosistema de carga busca transformar la experiencia del usuario y fortalecer la confianza en la adopción de vehículos eléctricos.