Las selecciones de Venezuela y Perú inician este sábado su participación en la Copa América de Brasil con un duelo marcado por las emociones y sensaciones contrarias que viven los dos equipos a raíz de sus últimos resultados.

La Vinotinto, por su parte, llega al torneo continental con una confianza rebosante, impulsada por la goleada por (0-3) lograda en un encuentro amistoso ante Estados Unidos.

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Entre tanto, los dirigidos por Ricardo Gareca afrontan el inicio del campeonato en medio de muchas dudas luego de haber perdido ante Colombia (0-3) en el estadio Monumental, en Perú.

Entre las claves del encuentro estará la capacidad que exhiba Perú para encontrarse a sí misma, volver al nivel que tenía hace un año y hacer valer la experiencia adquirida en el pasado Mundial de Rusia 2018, donde no pudo superar la fase de grupos.

Los dos equipos tienen muy presente que ganar este partido determinará en gran medida las posibilidades de ambos equipos de pasar a los cuartos de final, ya que en las jornadas siguientes deberán medirse con Bolivia y Brasil, los otros rivales del Grupo A.

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En la concentración venezolana tienen el pálpito de que este año puede ser el definitivo para que la Vinotinto cumpla su mejor campaña en la Copa América.

Sin embargo, Dudamel ha señalado que lo más importante para Venezuela es clasificar para el Mundial, dándole un valor menor a la Copa América, aunque prometió que la jugarán "con mucha ilusión".

Por los lados de los ‘incas’, el gran dilema que tiene Gareca es escoger a quién ocupará el extremo derecho, pues habitualmente se decanta por el habilidoso André Carrillo, pero su nivel en los últimos amistosos puede llevarle al banquillo en favor de Édison Flores.