Sin duda, para muchos ciclistas el hecho de pincharse y dañar la llanta es una situación que resulta tediosa y molesta, en algunos casos puede causar un verdadero desafío si no se tienen los conocimientos adecuados para poder realizar el cambio de goma de manera adecuada.

Lo primero que se debe tener en cuenta es contar con una llanta de igual dimensión de la que se va a remplazar. Acto seguido se debe poner la bicicleta ‘boca arriba, con puntos de apoyos en el sillín y el timón.

Se recomiendan cargar un neumático de reserva, si va a recorrer una larga distancia. | Foto: Enrique Díaz / 7cero

En este punto debe poner la cadena en el piñón más pequeño de los cambios, esto facilitará la extracción de la llanta. Para esto se debe liberar la palanca del eje girándola 180 grados, una vez esté suelta se debe proceder a halar firmemente hasta sacar el eje de la llanta y del tenedor del marco.

En la mayoría de los casos, al abrir la palanca de liberación rápida, los frenos también se desconectan. No obstante, de no ser así, puede liberar los cables presionando los calibradores sobre los frenos.

El siguiente paso es dejar desinflar el neumático por completo, para poder sacarlo del rin. Para hacer esto debe usar una palanca que se puede formar con una llave mecánica, insertando un extremo y empujando la llanta hacia afuera.

Si siente algo extraño en el rodamiento dela bicicleta después de este proceso, no dude en ir a un mecánico para verificar.

Una vez este realizado este paso debe volver a usar la llave o la palanca y con un movimiento contrario al realizado anteriormente, asegurarse que el borde de la llanta quedó dentro del rin. Si efectivamente todo se encuentra en su lugar, ya se puede proceder a volver a inflar el neumático hasta la presión recomendad.

Para finalizar debe volver a poner la llanta en el tenedor del marco de la bicicleta, y ajustar la palanca de liberación rápida, para así asegurar que el eje quede firme.

La bicicleta es el medio de transporte alternativo más usado en el país. | Foto: El País