El paradero de Valeria Afanador, una menor de 10 años, con síndrome de Down que desapareció el pasado 12 de agosto cuando salió de su colegio, Gimnasio Campestre Los Laureles, en el municipio de Cajicá, Cundinamarca, sigue siendo un misterio.
Este sábado, ciudadanos, amigos y vecinos de la familia, vestidos de blanco, con globos y pancartas, marcharon por las principales calles de la localidad para exigir una respuesta ante la desaparición de la niña.
Incluso, la Alcaldía de Cajicá en sus redes publicó una foto de la menor y señaló que, con apoyo de la Gobernación de Cundinamarca, se ofrecen hasta $50 millones de recompensa para quien dé información sobre el paradero de la pequeña.
La búsqueda se ha extendido por parte de los organismos de socorro de esta población en inmediaciones del río Frío, ya que una de las versiones apuntaba a que la pequeña se habría perdido por esa zona, sin embargo, tras recorrer el lugar el resultado fue infructuoso. No hay señales por ningún lado de Valeria.
A una sola voz, la comunidad gritó este sábado que la querían de vuelta y con sus padres y hermanos que la siguen buscando y esperando que alguien les diga qué pasó con la menor.
Desde el Cuerpo de Bomberos de Cundinamarca, informaron que una vez revisada las cámaras de seguridad del colegio, así como de sus alrededores, no se ha podido determinar cuál fue el camino que tomó Valeria una vez salió de la institución educativa.
Una posible caída al río fue descartada por el organismo de socorro al señalar que el afluente no tiene mayores corrientes y tampoco es caudaloso.
Las investigaciones se han enfocado ahora al interior del centro educativo, toda vez que lo último que la cámara de seguridad registró fue cuando la niña jugaba con una pelota y luego se observa cuando se dirigió hacia unos arbustos que colindan con las rejas de la institución.
Desde ese momento, se pierde todo rastro de Valeria, cuya desaparición fue reportada oficialmente hacia las 10:45 de la mañana, su búsqueda se ha extendido a municipios vecinos como Zipaquirá, Tenjo y Tabio.
Los padres de la menor, Manuel Afanador y Luisa Cárdenas, clamaron durante la marcha quien la tenga la devuelva al seno de su hogar donde la esperan.
En la búsqueda participan caninos, miembros de la Policía y hasta con drones intentan ubicar a Valeria.