Por medio de un comunicado, el presidente de la JEP, magistrado Alejandro Ramelli, respondió no solo a Rodrigo Londoño, excomandante de las Farc, sino que también envió un contundente mensaje a la opinión pública, al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, Países Garantes y Acompañantes y la CPI.
“La JEP no puede pasar por alto el dolor de las víctimas y sus demandas de verdad como pretenden algunos sectores, que desde la política quieren que la JEP desvíe su mandato”, señala el comunicado.
Además, menciona que lo que fue acordado en La Habana, ajustado después por el plebiscito, el Legislativo y la Corte Constitucional, es el modelo de Justicia Restaurativa cuyo centro son las víctimas.
La JEP indica que dicho modelo ha sido reconocido por la OCDE y en él participan de manera individual y colectiva alrededor de 400 mil víctimas, de todos los sectores de la sociedad, campesinos y comunidades étnicas.
Según Ramelli, la verdad judicial es la que ha permitido que las heridas empiecen a sanar y que las víctimas empiecen a encontrar a sus desaparecidos. Y recuerda que los beneficios para quienes se someten a la JEP están supeditados a sus aportes a la verdad, la no repetición y a que sus respuestas a las víctimas sean satisfactorias sobre hechos como el secuestro, los ‘falsos positivos’, el reclutamiento forzado, la violencia sexual y otros graves crímenes de guerra y de lesa humanidad.
“La JEP, como alta corte, y tribunal de cierre, continuará con su trabajo de reconciliación, pese a los reiterados esfuerzos de distintos sectores, comprometidos en la guerra, quienes siguen intentando por todos los medios que no se conozca la verdad y no se juzguen a los máximos responsables. La JEP seguirá desenterrando la que han pretendido esconder y esclareciendo patrones macrocriminales desconocidos por el país”, recalcó.
De igual manera, sobre los firmantes de Paz, los integrantes de la fuerza pública y los civiles que han comparecido ante la JEP, aseguró que “tendrán derecho a una sanción propia y a resolver su situación jurídica siempre y cuando asuman su responsabilidad de manera pública y entreguen verdad detallada y exhaustiva. No basta con asumir responsabilidades de manera general y eludir a las víctimas”.