En las últimas horas la Fiscalía General de la Nación confirmó en las últimas horas un duro golpe contra estructuras dedicadas a la adulteración de licor en Medellín y el Valle de Aburrá, especialmente durante el desarrollo de festividades como la Feria de las Flores que irá hasta el próximo 7 de agosto.

Y es que las autoridades lograron la judicialización de cinco personas, miembros de una misma familia, que presuntamente se dedicaban a esta actividad ilegal y peligrosa para la salud pública, pero además, según investigaciones, se encargaban de ingresar al país licor de contrabando. Al mes esta estructura tendría la capacidad de comercializar hasta 50.000 botellas de licor adulterado que representarían ingresos superiores a los $550 millones.

Según las investigaciones, la red ilegal alaquilaba inmuebles para llevar a cabo sus labores de adulteración y contrabando. | Foto: Fiscalía General

En 11 diligencias de allanamiento desarrolladas por parte de la Policía Fiscal y Aduanera (Polfa) y la Agencia ICE de los Estados Unidos, fueron incautadas un total de 2.829 botellas de licor adulterado, 95 de ellas de contrabando, una máquina selladora y otros elementos que serían utilizados para estos fines.

Al parecer todos estos elementos decomisados que quedaron en poder de las autoridades iban a ser comercializados durante los eventos de la Feria de las Flores que se desarrollan por estos días.

Pero además de la materia prima incautada, las acciones judiciales permitieron a la Dirección Especializada de Extinción del Derecho de Dominio de la Fiscalía imponer medidas cautelares sobre dos establecimientos comerciales y tres vehículos, avaluados en $6.300 millones, que serían utilizados para llevar a cabo sus actividades y que quedaron a disposición de la Sociedad de Activos Especiales (SAE).

Las investigaciones llevadas a cabo desde mayo de 2021 permitieron establecer que las personas implicadas en esta situación alquilaban casas en estratos medio y alto, donde precisamente se dedicaban a la producción del licor adulterado que luego era distribuido en establecimientos del centro de Medellín.

Cinco integrantes de una misma familia se dedicaban a producir y comercializar licor adulterado en Medellín. | Foto: Fiscalía General

Los cuatro hombres y la mujer capturada fueron cobijados con medida privativa de la libertad, aunque a esta última se le impuso detención domiciliaria, y deberán responder por los delitos de concierto para delinquir agravado con fines de producción de licor adulterado, corrupción de alimentos, productos médicos y material profiláctico agravado, y ejercicio rentístico de actividad monopolística del arbitrio rentístico.

Uno de los procesados ya había sido sentenciado por conductas delictivas similares en los años 2009 y 2016, mientras que otro fue condenado a 40 meses de prisión en 2010.

Los más recientes resultados presentados por la Fiscalía se producen con pocos días de diferencia luego de que en actividades similares, la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá anunciara el desmantelamiento de un alambique clandestino en el barrio Campo Valdés, al nororiente de Medellín.

Licor adulterado.

En este lugar que tenía como fachada una chatarrería, las autoridades encontraron toda la cadena de producción dispuesta para este licor ilegal que también iba ser comercializado durante los primeros días de agosto, y además incautaron 1.500 litros de este líquido entre whisky, vodka, vino y ron de diferentes marcas, 50 galones de licor listos para empacar, 35 mil etiquetas falsificadas, 10 mil tapas y 95 cajas de licor.

En el operativo fue capturada una mujer quien se hace llamar `Dora´ por el delito de corrupción de alimentos y quien al parecer sería la administradora del lugar que producía ingresos para estructuras ilegales que operan en esta zona de la ciudad por $100 millones cada mes.

Las autoridades de salud del Distrito recordaron que el consumo de licor adulterado puede tener graves impactos en el organismo, ya que los compuestos agregados pueden ser tóxicos y causar problemas de salud significativos.

Entre ellos están las complicaciones gástricas, pero sobre todo la presencia de metanol, un alcohol altamente tóxico para el cuerpo humano y que al ser procesado por el hígado se convierte en productos químicos venenosos como formaldehído y ácido fórmico. Estos compuestos pueden causar daño hepático, ceguera, daño neurológico y, en casos graves, incluso la muerte.