La Defensora del Pueblo, Iris Marín, pidió al Senado de la República priorizar la independencia judicial y la paridad de género en la elección de la persona que reemplazará al magistrado José Fernando Reyes en la Corte Constitucional.
“Esta semana el Senado de la República elegirá a la persona que reemplazará al magistrado José Fernando Reyes, de terna elegida por la Corte Suprema de Justicia, la decisión está en titularidad de un órgano político, lo cual tiene sentido y hace parte de nuestro diseño constitucional”, explicó la funcionaria.
Para Marín, esto no elimina la responsabilidad del Senado de dar una discusión que se enmarque en el principio central de la rama judicial, su independencia, autonomía e imparcialidad, inclusive frente a sectores políticos.
“Sin embargo, en los últimos días se han escuchado voces que centran el debate en carácter progobierno o antigobierno de quienes ocupan la magistratura de la Corte Constitucional actualmente y de quienes integran la terna”, señaló Marín.
La Defensoría del Pueblo aclaró que una decisión judicial no es buena o mala por apoyar o negar una posición del Gobierno, sino su legitimidad está en la argumentación jurídica.
Además dijo que también es cierto que en algunas ocasiones los jueces han sido presionados o han actuado sin la debida independencia, por lo que es necesario la autocrítica al interior de la propia magistratura para evitar su cooptación.
La funcionaria indicó en su mensaje de casi cinco minutos, que que los jueces deben declararse impedidos cuando la decisión les genera un conflicto de intereses.
Por ello y ante la elección de esta semana, en la Defensoría del Pueblo promueven una campaña para alcanzar la paridad en las altas cortes con base en fundamentos jurídicos constitucionales. Además, dijo, se debe avanzar en una judicatura que represente la diversidad étnica del país.
Pero advirtió que hasta ahora hay mucha resistencia, sobre todo porque este año se ha reducido la participación de mujeres en las altas cortes a pesar de que en los recientes procesos de elección se han postulado mujeres con experiencia y con verdadero talante de juezas.
“De elegirse un hombre, la única corte, exceptuando la JEP, que se había acercado a la paridad con 4 mujeres de 9 miembros, que es la Corte Constitucional regresaría al 33 %, el que se encuentra actualmente, que se acerca a la medida de participación de mujeres en los altos cargos a nivel general”, sostuvo Marín.
Por ello hizo un llamado a los sectores políticos a dejar de lado la estigmatización y a tomar una decisión que busque la paridad, refleje de mejor manera la diversidad étnica y regional del país y se oriente a garantizar la independencia, autonomía e imparcialidad judicial.
“Es decir, que la elección de la Corte Constitucional no sea para un sector particular sino para el fortalecimiento del estado de derecho”, puntualizó la defensora.