Desde la instalación de bloques de concreto en la carrera 4 entre calles 10 y 11 del centro de Cali, ya se han registrado al menos dos accidentes vehiculares durante la noche, según reportes de algunos ciudadanos a nuestro canal El País Denuncia.
Mientras la comunidad reclama falta de visibilidad y afectaciones a la circulación vehicular, la Secretaría de Movilidad defiende la intervención como parte de un plan piloto de pacificación vial para proteger al peatón.
Opiniones divididas en el centro de la ciudad
Habitantes y trabajadores informales del centro de Cali han expresado su inconformidad ante la reciente instalación de bloques de concreto, también conocidos como taches, sobre la carrera 4 entre calles 10 y 11.
La intervención, realizada por la Secretaría de Movilidad, ha sido señalada por residentes como una causa directa de accidentes nocturnos, al no contar con una señalización visible en condiciones de baja luz.
“Eso ha incomodado demasiado, ha cerrado la vía. Ya los carros pasan y tratan de tirársele a uno encima”, manifestó un vendedor de la zona a los micrófonos de El País.
El comerciante agregó que se han presentado casos de personas tropezando y hasta vehículos dañados. “Ayer una señora también dañó el carro contra eso. Yo no sé el alcalde por qué metió eso. Es malgastar la plata, habiendo tantas necesidades en Cali”.
A esto se suma la molestia por la supuesta falta de comunicación previa a la instalación de los taches. Según otros ciudadanos, no se emitió ninguna advertencia ni socialización del proyecto con quienes trabajan diariamente en la zona.
“Nunca nos dijeron nada. Ahora hay una marcha porque quieren acomodar a los vendedores ambulantes. El centro está volteado”, afirmó. Cabe destacar que este proceso de reportería se realizó el pasado martes, 29 de julio.
El País también consultó a Jimmy Núñez, presidente del Sindicato de Vendedores Ambulantes y Estacionarios de Cali (Sintraviecali), quien corroboró lo manifestado por varios vendedores informales sobre los efectos negativos de la semipeatonalización en el centro de la ciudad.
Núñez afirmó que esta medida ha reducido significativamente las ventas y la afluencia de público, afectando la estabilidad económica de quienes dependen del comercio informal.
Además, señaló que, presuntamente, se han presentado accidentes no solo con vehículos, sino también con peatones.
“Se impacta todo, entonces se estanca la economía, se vuelve un problema social y lo que no se quiere es eso, por el contrario, que se reactive la economía, se haga turismo, pero hay que tratar de hacer las cosas con inclusión en todos los procesos”, expresó.
Esto dijo Movilidad
Frente a las quejas ciudadanas reportadas a El País, el subsecretario de Movilidad Sostenible y Seguridad Vial, Carlos Alberto Santacoloma Hoyos, indicó que la instalación de los taches hace parte de un plan de ‘pacificación del tránsito’ con enfoque en la protección del peatón.
Según expresó, los elementos están debidamente señalizados, cuentan con reflectivos y cumplen con los manuales técnicos viales, así como con los lineamientos de planeación integral de movilidad urbana.
También afirmó a El País que no hay registros que evidencien un aumento de la siniestralidad desde la implementación de estos dispositivos.
El funcionario explicó que el plan se viene ejecutando con actores tanto formales como informales del sector, y que se desarrollaron estudios previos y posteriores a la COP16, realizada en la ciudad entre octubre y noviembre del 2024.
Por otro lado, la Secretaría de Movilidad publicó un balance el pasado miércoles 30 de julio en el que destacan lo que consideran resultados positivos del plan piloto.
De acuerdo con el reporte, desde la apertura del carril peatonal entre las carreras 4 y 5 y las calles 10 y 13, ha habido una disminución en la cantidad de infracciones.
“Para dos semanas, hacer 30 comparendos es poco, de acuerdo con los que se hacían antes”, explicó Duvier Ossa Giraldo, gestor del Centro de Gestión de la Secretaría.
Según el informe, se han realizado 19 comparendos a motociclistas, con tres inmovilizaciones, seis a vehículos y dos a camionetas. También se identificaron infracciones relacionadas con estacionamiento indebido e invasión del carril peatonal.
Hay que mencionar que, aunque desde la Administración Distrital insisten en los beneficios de la medida, la percepción de algunas personas que transitan y laboran en la zona sigue siento contraria.
Para varios comerciantes informales, más que una solución, los bloques se han convertido en un obstáculo que interfiere con su trabajo diario y pone en riesgo a conductores y peatones.
Por ahora, las opiniones continúan divididas entre quienes ven en la medida un paso hacia una ciudad más caminable, y quienes la consideran una decisión desconectada de las realidades cotidianas del centro caleño.