En la laguna de Sonso también hubo grave daño arqueológico, dice Inciva

Expertos de la entidad encontraron fragmentos de cerámica de un asentamiento humano de hace, por lo menos, dos mil años que fueron dañados por las obras en el humedal.

En la laguna de Sonso, el humedal más grande del Valle del Cauca, no sólo hubo gran daño ambiental, sino un irreparable daño arqueológico.

Así lo indicaron funcionarios de Inciva, Instituto para la Investigación y Preservación del Patrimonio Cultural y Natural del Valle, quienes durante la visita realizada al humedal el fin de semana, hallaron partes de lo que serían objetos de alguna comunidad indígena asentada hace por lo menos 2 mil años atrás.

 “Un compañero encontró un pedacito de cerámica de un objeto de un indígena precolombino, pero ya no se puede decir a qué cultura y a qué época pertenecen porque se pierde toda la evidencia”, aseguró Jorge Carlos Figueroa, director de Inciva.

Por su parte, Alexander Clavijo, antropólogo de Inciva, explicó que ahora es casi imposible identificar los hallazgos.

"Toda la parte estratigráfica, de fechamiento y ubicación contextual se dañó, no podemos identificar exactamente qué era ni cómo era. Lo más grave aquí, es que no se hizo un estudio previo, la ley 397 de 1997 y la 1185 de 2008, dice que previo a cualquier movimiento de suelo se debe levantar un estudio de arqueología preventiva en todo el país, el cual no se hizo y tenemos más de dos kilómetros de impacto fuerte sobre el suelo", explicó.

“La dinámica hidráulica también afectó, se va a aumentar la sedimentación, el daño va a continuar, los regímenes de inundación van a cambiar; el daño ambiental es incalculable", reiteró Clavijo.

En el predio conocido como Rancho Grande, al norte de la laguna, desde octubre y de forma progresiva, fueron arrasadas 34 hectáreas de vegetación que se convirtieron en un desierto arado y listo para la siembra de caña y se levantó un dique de  2.289 metros.

Para los habitantes de la zona, con la desviación del caño de drenaje el nivel del agua se redujo hasta en un 50%; lo que más les preocupa es que con la llegada de las lluvias, el humedal no va a tener como absorber el agua y las inundaciones sean peores que las registradas en años anteriores.

La gobernadora del Valle, Dilian Francisca Toro, delegó un grupo de topógrafos para que el próximo martes con la CVC hagan una visita y determinen el daño y el valor para reparar en la Laguna de Sonso.

"El miércoles podremos tener un estimado de cuanto puede costar estas intervenciones de obras y así entre todos, tanto Alcaldía de Buga como gobierno departamental entrar a resarcir el daño en la Laguna”, manifestó la Gobernadora del Valle.

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Álvaro José Aguilar, presidente de la junta de acción comunal de la vereda El Porvenir, en Buga, dijo que la situación de los pescadores es bastante crítica: “Vemos con buenos ojos que la gobernadora se apersone de esta situación, ojalá salven la Laguna de Sonso pues estamos muy mal”.

La laguna de Sonso tiene un área total de 2045 hectáreas, de las cuales 745 corresponden al espejo de agua y 1300 a la zona amortiguadora contra inundaciones. Esto la convierte en el humedal más extenso e importante del Valle del Cauca.

En este ecosistema conviven 217 especies de árboles, 179 especies de aves (de las cuales 55 son migratorias), 40 especies de peces y 26 especies de reptiles.