Salud
¿Cuáles son los efectos del selenio en el organismo?
Encuentre aquí las candidades diarias de ese elemento dependiente de la edad de cada persona.
El cuerpo humano necesita de minerales y nutrientes para su buen funcionamiento, entre ellos hay uno que muy poco se tiene en cuenta, el selenio. En ese sentido, es necesario aclarar por qué es importante para el cuerpo y si presenta déficits del mismo.
El selenio es un oligoelemento el cual es necesario en pequeñas cantidades para mantenerse sano. Según el portal de MedlinePlus, la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, “el selenio ayuda al cuerpo a producir proteínas especiales, llamadas enzimas antioxidantes. Estas participan en la prevención del daño celular”.
Además, algunos estudios señalan que esa sustancia puede ayudar para prevenir algunos tipos de cáncer y proteger el cuerpo de efectos tóxicos de metales pesados y otras sustancias dañinas.
Asimismo, aclaran que es importante generar más estudios sobre los beneficios del selenio para tener más precisión en la información, e insisten en que tomar un suplemento de selenio, así como llevar una alimentación sin acompañamiento médico, no se recomienda para esas afecciones mencionadas.
El selenio también es un bueno para el buen desarrollo de la función de la glándula tiroidea, la producción del ADN y para proteger el cuerpo contra infecciones y el daño causado por radicales libres.
De otro lado, algunos especialistas insisten en que el poder de esa sustancia se podría emparentar con funciones similares a la de la vitamina E.
Sin embargo, siempre es mejor consultar al médico antes de comprar algún suplemento o de tomar una decisión vinculada a la salud y la alimentación.
¿Cuánto selenio necesita el ser humano?
La cantidad diaria de ese elemento depende mucho de la edad, el estado de salud y si tiende a padecer de alguna enfermedad.
Las cantidades promedio en microgramos (mcg), según los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH), son:
En bebés hasta los 6 meses de edad, la cantidad diaria debe ser de 15 mcg, y de 7 a 12 meses, debe ser de 20 mcg.
En niños de 1 a 3 años es de 20 mcg, de 4 a 8 años es de 30 mcg y de 9 a 13 años, 40 mcg.
En adolescentes de 14 a 18 años de edad, se recomienda 55 mcg; en adultos de 19 a 70 años, de 55 mcg, y de 71 o más años de edad, es de 55 mcg.
En el caso de mujeres y adolescentes embarazadas, debe ser de 60 mcg, y en adolescentes en período de lactancia, de 70 mcg.