Paloma, Cabal y Uribe Londoño en la disputa que definirá al candidato del Centro Democrático, estas son las movidas

El Centro Democrático elegirá a su candidato, a través de una encuesta internacional que se realizará en las próximas semanas. Esta persona seguramente competirá en una consulta interpartidista entre precandidatos de oposición, entre los que hay una larga lista.

Los nombres fijos por ahora son Paloma Valencia, senadora y una de las figuras más influyentes dentro del uribismo; María Fernanda Cabal, conocida por su discurso firme y posiciones conservadoras; Paola Holguín, senadora con experiencia en gestión política y legislativa y también se encuentra Andrés Guerra, excandidato a la Gobernación de Antioquia.

Ahora también ingresa a este grupo el padre del asesinado Miguel Uribe Turbay, Miguel Uribe Londoño, quien solicitó hacer parte del proceso, lo cual fue aceptado por el movimiento que espera tener el nombre de su candidato entre diciembre de 2025 y enero de 2026.

Para el analista político Eduardo Llano, la precandidatura de Miguel Uribe Londoño responde a la necesidad del Centro Democrático de tener un aliado fiel. “Uribe no puede permitir que María Fernanda Cabal se quede con el partido. Necesita un jugador que le sea leal, y esa ficha era Miguel Uribe Turbay y ahora será Miguel Uribe Londoño”, explica.

Llano agrega que esta jugada se entiende dentro de un contexto emocional y no solamente racional: “En política las emociones pesan más que los argumentos o las cifras. Uribe lo sabe muy bien. Cuando se mueve la emoción de la gente, la razón queda anulada, y ese es el terreno en el que mejor se mueve el expresidente”.

Otro elemento clave en la ecuación electoral puede ser Juan Carlos Pinzón, que quiso buscar el aval del Centro Democrático, apoyo que no obtuvo, por ahora, pero que para algunos podría ser una figura que genere unión de cara al 2026. Sin embargo, precandidatas como María Fernanda Cabal habían rechazado la posibilidad de que a última hora entren competidores por la candidatura en el CD, lo que no se cumplió en el caso del padre del senador asesinado.

Sobre esto, el analista Yann Basset advierte que una candidatura por fuera del partido no beneficiaría del guiño de Uribe y “me parece muy difícil que Pinzón logre consolidarse. Es resistido en muchos sectores de la derecha por haber sido santista y no llegaría fácilmente a más sectores de centro”.

Resalta, que el llamado de Uribe a definir pronto el candidato del Centro Democrático, busca consolidar a uno de estos líderes como la carta fuerte del partido, evitando divisiones internas que podrían debilitar la campaña de la derecha frente a otros bloques políticos.

“La influencia de Uribe en esta dirección va a ser determinante para elegir al candidato de Centro Democrático y eso es fundamental en un contexto con mucha fragmentación y numerosos precandidatos. Él, como es muy respetado por todos los actores de la derecha, tendrá un papel de facilitador que permita a este sector consolidar una candidatura única”, agrega Basset.

Por su parte, Eduardo Llano advierte que “si la campaña se reduce a la emoción del miedo y a la promesa de seguridad, Uribe puede volver a marcar la agenda. Pero si no se traduce en propuestas claras, esa fuerza puede diluirse rápidamente”.

Para el abogado y analista político José David Benavides, más allá de las decisiones judiciales, la imagen de Álvaro Uribe está fortalecida y que tiene plena vigencia, por lo que seguramente tendrá gran influencia en las elecciones que vienen. “Mal o bien aún tiene un legado”, dijo.