'En Marcha', el nuevo movimiento político que agrupa a los disidentes liberales

“El Partido Liberal representa el pasado; el movimiento En Marcha, representa el futuro”.

Así lo aseguran algunos líderes políticos que militaron bajo la bandera roja, como Juan Fernando Cristo y Guillermo Rivera, y que ahora buscan enarbolar otro estandarte en una nueva colectividad.

En Marcha se llama el movimiento político que a finales de noviembre pasado lanzó oficialmente un grupo de disidentes del Partido Liberal y que se inscribió ante el Consejo Nacional Electoral, CNE, con el fin de participar en las elecciones regionales de octubre.

Otros de los dirigentes que se han sumado a la nueva colectividad son Luis Eduardo Garzón, Yesid Reyes, Cecilia López y Ramiro Bejarano, quienes han asegurado que tendrán sus puertas abiertas para que otros políticos que compartan sus ideales.

“Estamos invitando no solamente a dirigentes, jóvenes y organizaciones sociales que militaron en el Partido Liberal, sino a sectores independientes o figuras independientes. Es una convocatoria amplia a quien entienda que ya los partidos tradicionales no son el vehículo ni el instrumento para interpretar a la ciudadanía y las nuevas realidades sociales”, señaló el exministro Cristo.

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Según él, pretenden construir un movimiento con “liderazgo colectivo” que enfrente el caudillismo, que luche contra la polarización y que trabaje en la defensa del Acuerdo de la Paz con las Farc y su implementación.

De acuerdo con el también exministro Guillermo Rivera, esta organización trabajará por que la sociedad colombiana sea más equitativa.

“Vamos a defender la paz, los derechos humanos, las libertades públicas y la iniciativa privada, pero con una perspectiva de desarrollo sostenible, respetuoso del medio ambiente, y vamos a defender a las minorías”, agregó.

También indicó que su interés no es afectar al liberalismo: “Nosotros estamos interesados en construir un movimiento político que sea coherente, que realmente represente las banderas en que creemos y por las que hemos luchado. Nos parece que el liberalismo se quedó en el pasado”.

Asimismo, Cristo indicó que le desean la mejor suerte a los ‘rojos’, pero “estamos convencidos de que el Partido Liberal de hoy no defiende los ideales liberales y el pensamiento liberal. Nosotros queremos salir a las calles a defender este ideario que no fueron capaces de defender”.

El exmilitante liberal Luis Ernesto Gómez, aunque no hace parte del nuevo movimiento, considera acertado que personas que militaron durante tantos años en la colectividad ‘roja’ haga un proceso ciudadano como este.

“Creo que definitivamente las elecciones de 2019 van a hacer unas elecciones donde los partidos van a tener serias dificultades representando las nuevas agendas ciudadanas y por eso los movimientos ciudadanos van a ser determinantes”.

Por su parte, la concejal liberal de Cali Clementina Vélez señaló que “cada quien se va para dónde se quiere ir y se sienta mejor”, pero no considera que Juan Fernando Cristo pueda recoger todas las banderas del partido.

“Respeto su nuevo movimiento, que Dios lo acompañe, que le vaya bien, pero el Partido Liberal necesita organizarse y unirse”, dijo Vélez. Añadió que la tradicional colectividad “no se ha acabado, se está reorganizando y tiene un jefe nacional, que es César Gaviria”.

En Marcha no es el único movimiento que busca formar tolda aparte. El Nuevo Liberalismo, liderado por Juan Manuel Galán, trabaja para recuperar su personería jurídica, pese a que a principios de este mes el CNE se la negó.

Pero tal parece que los propósitos de ambas colectividades tienen mucho en común. Así lo reconoció el exministro Cristo, quien dice que es cercano a Galán, con quien comparten “la defensa de los mismos ideales”.

“Ellos están en un propósito loable de recuperar la personería jurídica del Nuevo Liberalismo; nosotros hemos decidido lanzar un movimiento distinto, con más visión de futuro que de pasado, pero seguramente en el camino nos encontraremos”, afirmó.

Al respecto, Rivera sostuvo que aunque coinciden en las razones por las que se fueron de las toldas ‘rojas’, no han hablado de hacer un proyecto conjunto.

Entre tanto, Galán explicó que ambos proyectos tienen puntos de coincidencia, pero que cada uno debe darse su tiempo: “Lo primero, por ahora, es que cada una de las nuevas fuerzas liberales que están surgiendo puedan presentar su propia identidad para mostrar en qué cree, cuáles son sus principios, qué valores busca defender y, una vez ese proceso se dé, pues sí se podrían presentar acercamientos”.

El inconformismo con la colectividad roja se originó desde que en las pasadas elecciones presidenciales, César Gaviria anunció el apoyo de los liberales al candidato presidencial por el Centro Democrático, Iván Duque.

A finales de septiembre de 2018, varios liberales firmaron una carta en la que le renunciaban a su partido por considerar que este había perdido su horizonte.

“Tenemos claro que en el espacio anodino en que se encuentra el partido, no hay espacio alguno para plantear nuestras posiciones y preferimos apartarnos de su institucionalidad para salir de manera libre e independiente a defender las verdaderas ideas liberales en todo el territorio nacional”, se lee en el documento.

Rivera señaló que el Partido Liberal fue un abanderado de los derechos de las víctimas y de la paz, por lo que considera “incoherente” el apoyo a Duque. “En esas circunstancias no podemos militar en las filas de un partido que actúa en contravía de lo que ha defendido a los últimos años”.

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