Reaparece la sombra

El manto de dudas por posibles dopajes se cierne desde hace tiempo sobre el ciclista Chris Fromme y su equipo Sky.

Ahora, la Unión Ciclística Internacional, UCI, confirma el resultado positivo en una prueba realizada al pedalista británico durante la última Vuelta España de la que fue campeón.

Si bien Froome tiene aún una instancia para explicar el resultado, lo cierto es que en su orina se detectó el doble de la cantidad permitida de Salbutamol, medicina usada por los asmáticos que en dosis mayores aumenta la capacidad pulmonar, lo que beneficiaría a un deportista en competencia.

La polémica no se ha hecho esperar y son varios los ciclistas de elite que le piden a la UCI aplicar con rigor el reglamento, sobre todo porque el involucrado ha sido el ganador de las más importantes pruebas internacionales en los años recientes.

Con el caso Froome la sombra del dopaje vuelve a rondar el ciclismo mundial, cuando ya se creían superados los escándalos que hace una década afectaron a ese deporte y que involucraron a equipos, pedalistas, médicos y laboratorios farmacéuticos.

Así se pone de nuevo en la picota pública a uno de los deportes con más seguidores en el mundo.

Y otra vez quedan en entredicho el juego limpio y la credibilidad, los valores que deben primar en el ciclismo internacional.