Inaceptable

Escenas como la de la semana anterior en la que encapuchados se toman las manifestaciones estudiantiles, atacan a la Fuerza Pública con papas bomba y realizan actos de vandalismos no deben repetirse ni tolerarse.

Como lo han pedido las directivas de la Universidad del Valle, sus profesores y la inmensa mayoría de sus alumnos que rechazan los hechos violentos, a esos infiltrados hay que desenmascararlos y limpiar a la institución de su nefasta influencia.

Ya se sabe que se trata de estrategias subversivas que nada tienen que ver con la Universidad ni con los reclamos de los estudiantes, y cuya intención principal es desestabilizar la educación pública y la institucionalidad.

Es la historia que se repite por años, que ha provocado muertos, heridos y destrozos en no pocas ocasiones y le ha causado daños al alma máter así como a la ciudad.

Por ello es hora de responder al llamado hecho desde Univalle y detener a quienes se esconden detrás de unas capuchas para cometer sus fechorías.

Si quienes promueven esos disturbios violentos ya están identificados, como asegura el Comandante de la Policía Metropolitana, hay que judicializarlos y hacerles responder por los perjuicios que han ocasionado.

A la Universidad hay que protegerla y liberarla de quienes le generan la zozobra y la convierten en epicentro de violencia y delincuencia.