Orgullo del Valle

Las mujeres de Cali y el Valle del Cauca han sido pioneras en la historia del país. Un ejemplo de esto es la vida de Esmeralda Arboleda. Nacida en Palmira el 7 de enero de 1921, a sus 18 años se convertiría en la primera mujer aceptada en la Universidad del Cauca, donde estudió derecho.
Posteriormente, obtuvo una beca para hacer una especialización en justicia para menores en la Universidad de Indiana.

Esmeralda se convertiría en una de las principales líderes del movimiento femenino sufragista, junto con Josefina Valencia, con quien formaría el Comité Pro-voto de la Mujer en 1954. En este mismo año, los trabajos de Arboleda darían sus frutos, cuando el voto femenino fue aprobado de manera unánime. No obstante, en 1955, Esmeralda renunciaría al gobierno de Rojas Pinilla, al considerar que este estaba siendo cada vez más autoritario.

Sufrió un intento de asesinato en 1957, viéndose obligada a vivir en Boston hasta octubre de ese mismo año. En 1958 sería electa como senadora por el Valle del Cauca, convirtiéndose en la primera mujer en la historia del país en ser elegida para el Congreso de Colombia. Entre 1967-68 fue nombrada embajadora de Colombia ante Austria, convirtiéndose también en la primera mujer embajadora en la historia del país. Esmeralda fue, sin lugar a duda, una mujer que enalteció la historia de Cali, el Valle del Cauca y Colombia.

Adicional a Arboleda, a Cali la han seguido haciendo grande las mujeres de la ciudad y el departamento. María Isabel Urrutia, se convertiría en la primera persona colombiana en obtener una presea dorada en unos juegos olímpicos en Sídney, Australia, el 20 de septiembre del 2000.
Millones de colombianos aún recordamos ese momento donde una vallecaucana nos llenaba de orgullo. Urrutia levantó las pesas en la categoría de 75 kilos, mientras millones de ciudadanos pegados al televisor le enviábamos ánimo y sosteníamos la respiración, como si nosotros también estuviésemos con ella levantando esa pesa.
Posteriormente, sería elegida a la Cámara de Representantes entre el 2002-2010.

Recientemente, el equipo femenino sub-17 de Colombia nos daría nuestra mayor gloria futbolística, un subcampeonato mundial. Este equipo de 21 guerreras fue liderado por Linda Caicedo quien a sus 14 años debutó en la Liga Femenina con el América de Cali en el 2019, siendo campeona y goleadora. En el 2021 volvería a ser campeona de la Liga Femenina con el Deportivo Cali y fue elegida mejor jugadora de la Copa América Femenina del 2022. Adicionalmente, de las 21 jugadoras de la selección sub-17, 9 juegan para un equipo femenino en el Valle del Cauca.

Las mujeres de Cali y el Valle se han caracterizado por cuestionar al poder, abrir caminos para futuras generaciones, y demostrar que un mejor camino es posible. Todas estas cualidades las posee Diana Rojas quien, en mi opinión, es la lideresa apropiada para tomar las riendas de la ciudad. Esta mujer se ha ganado a pulso su lugar en la política de la ciudad, denunciando la corrupción existente en la administración pública del alcalde Jorge Iván Ospina. Diana fue fundamental para que se destaparan escándalos como las irregularidades en la contratación de la reparación vial de Cali, o el cheque en blanco que el Concejo de Cali le dio al alcalde. Lo que necesita Cali es el liderazgo de una mujer frentera e íntegra, la ciudad necesita a la caleñísima.