Está lejos la paridad política

Acaba de ser publicado el Índice de Paridad Política para Colombia del proyecto Atenea, liderado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo Pnud, la Entidad de las Naciones Unidas para la Igualdad de Género ONU Mujeres y el Instituto Internacional para la Democracia y Asistencia Electoral - Idea Internacional. Atenea es un mecanismo que genera información sobre la participación política de las mujeres a través del Índice de Paridad Política (IPP), el cual permite medir el ejercicio real de los derechos políticos de las mujeres a través de un instrumento comparable, evaluado en países como Argentina, Chile, Guatemala, Honduras, México, Panamá, Perú y Uruguay.

La paridad entre hombres y mujeres en el campo político todavía no llega. De hecho, el anhelo de profundización de la democracia y de fortalecer la realización de los derechos de participación igualitaria, todavía no toca la realidad. Los datos así lo confirman: Sólo el 12% de las mujeres son alcaldesas municipales y solo el 20% de los miembros del Congreso son mujeres. De estas cifras se puede concluir que los resultados para Colombia no son alentadores. Según el IPP que mide el ejercicio real de los derechos políticos de las mujeres, arrojó un resultado mediocre para el país, obtuvimos 53,9 puntos sobre 100. El resultado es superior al de Argentina que para el 2016 tenía 44,7 y Chile que contó con 38,21 para el 2015.

Llegando a la región, desde este último elemento de participación política de las mujeres, y de acuerdo con un estudio del Observatorio de Cali Visible, el periodo de 2016 a 2019, ha sido el que mayor presencia de mujeres ha tenido en la Asamblea, el 43% de diputados del Valle son mujeres, 9 de 21. El Valle comparado con el resultado nacional, tiene el triple de mujeres. Adicionalmente, es un dato clave que, en esta vigencia, fue electa por primera vez en el Departamento una mujer como gobernadora. Los números para el Concejo de Cali nos indican que para el periodo 2016 a 2019 fueron electas 6 mujeres, que constituye un 28,6% de esa corporación. Esta participación debería ser mucho mayor.

Según los autores del informe Atenea, hay que seguir con paso firme hacia la democracia paritaria y la igualdad sustantiva en la región y en Colombia para llegar a la igualdad de género, y que no sea solo un derecho consagrado en la ley, sino que se exprese en la realidad en las políticas públicas, los presupuestos y los programas. “El cambio está ocurriendo, pero requerimos que sea más rápido. Por ello, se requiere una gran alianza para la plena realización de los derechos políticos de las mujeres que sume a los partidos políticos, el gobierno, los organismos electorales, las organizaciones de la sociedad civil, la academia y la sociedad en general”, concluye el informe.

Por todo lo anterior, debemos seguir avanzando en el empoderamiento y apoyo para que las mujeres de nuestra región encuentren espacios en la agenda política, y participen en las definiciones y decisiones de los destinos de nuestras instituciones. Esto traerá nuevos vientos para nuestra gestión pública, la cual se beneficiará de las bondades que caracteriza el trabajo femenino.

Para finalizar, debemos reflexionar alrededor de esta inquietud: hay una candidata muy fuerte disputando la Gobernación del Valle, pero no hay alguna mujer con estas opciones para la alcaldía de Cali. Debemos hacer un esfuerzo como sociedad para que más mujeres asuman en Cali el liderazgo político en el Concejo y Alcaldía. En el sector Empresarial la ausencia de mujeres en juntas directivas es una de nuestras debilidades, aunque en el campo gremial cada vez las mujeres toman más cargos directivos: Asocaña, Andi, Fenalco, ProPacífico…

*Rector Universidad Javeriana Cali

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