La amenaza verde

Cuentan los protagonistas de aquella época, que en los años 60 fue cuando el apodo de la ‘Amenaza verde’ se hizo popular en Colombia para referirse al Deportivo Cali, el equipo que durante esa década causaba temor a cualquier rival. Tiempo después, producto del paso del tiempo y de una que otra amarga derrota, ese remoquete ha estado un poco en el olvido, al punto de que es muy raro que las nuevas generaciones de hinchas llamen así al club.

Sin embargo, viendo las imágenes del domingo pasado, resulta inevitable y hasta injusto no acordarse de ese histórico y bello calificativo para otorgárselo al equipo femenino del Cali, que conquistó un nuevo título de liga en Palmaseca frente a Santa Fe, en una emocionante definición por penales.

Sí, ellas, las guerreras, las que juegan a sol y sombra sin quejarse, las que sudan la camiseta como nadie y que ganan los partidos definitivos sin importar la cancha, son hoy por hoy la auténtica amenaza verde.

Solo hay que observar la manera en la que encaran los partidos, la pasión con la que van a cada pelota, la forma como festejan cada gol. Si los últimos años han sido difíciles en todo sentido para el plantel masculino, debemos decir que nuestras mujeres han cultivado el inicio de un Cali gigante en su categoría, con tres títulos (2021-2024-2025) en solo cinco años.

Si somos justos, deberíamos hablar aquí de todas las jugadoras que han hecho parte de este proceso que inició hace ya algunos años. De Linda Caicedo, de Manuela Pavi, de Paula Medina… pero, particularmente, hay que exaltar en este reciente plantel campeón el papel de Luisa Agudelo con su carisma, su talento y sus atajadas claves; el de la capitana Paola García con su temperamento y el de Ingrid Guerra, la delantera combativa que todo equipo desearía tener.

Tampoco podemos olvidarnos de quién ha sido el gestor de este éxito desde la línea técnica. Si los libros recuerdan con merecido cariño al argentino Francisco Pancho Villegas, técnico del Cali en sus primeras tres estrellas profesionales (65, 67 y 69), también deberán incluir en esas páginas doradas a Jhon Albert Ortiz, el entrenador que ya ganó igual número de títulos con el plantel femenino.

Es el premio más que justo para un hombre que desde hace más de 15 años trabaja en la formación de talentos del fútbol femenino. Primero desde la escuela Carlos Sarmiento Lora y luego en este Cali, al que le ha dado un estilo aguerrido, pero que trata de respetar siempre la calidad del fútbol bien jugado.

Ahora, la amenaza verde se alistará para cruzar fronteras: el próximo destino es Argentina, donde disputará la Copa Libertadores de América, un torneo que siempre hemos querido tener en las vitrinas. ¿Será que nos vamos ilusionando?