A que te cojo Ramón…

A que te cojo ratón, a que no gato ladrón. En el depravado mundo de la corrupción colombiana, esto se tipifica para ilustrar las formas sucias de taparse los delitos en esta administración. La no sorpresiva noticia de Carlos Ramón González, cerebro de la olla podrida de la Ungrd, da cuenta de ello. Este es el ratón y Petro el gato.

El ratón prófugo de la justicia tiene en su contra una orden de captura y se encuentra en la madriguera nicaragüense, bajo el manto protector, corrupto y cómplice de ese gobierno. Esto, por solicitud de Petro al gobierno de Ortega que cohonesta con la podredumbre colombiana. Lo más grave: nuestro gato con rabo de paja no lo va a perseguir.

Esta fábula tiene más actores, además del roedor y el felino. Está la ‘Hormiguita Trabajadora’. González está en Nicaragua desde noviembre de 2024; día de su imputación de cargos por cohecho, lavado de activos y peculado y se pasea libremente por el orbe. En el entre tanto, un Uribe está preso y al otro lo asesinaron. En la fecha de marras, la Embajada de Colombia en Nicaragua solicitó a Ortega que se renovara la cédula de residencia del delincuente Ramón en su país. La diplomacia colombiana dijo: “Conforme a lo dialogado en pasadas reuniones en relación con el estatus de residente del señor Carlos Ramón González, el cual se encuentra en Nicaragua desde el pasado 5 de noviembre del año 2024 y desde esa fecha no ha salido del país”. Por los buenos oficios muiscas, el sandinista le prorrogó la residencia al roedor para evadir la justicia y sus consecuencias. Esto por la módica suma de US$56. Recordemos: el amigo del queso, se robó la bicoca de 1,5 billones de pesos.

El excanciller Murillo, que acá es la zarigüeya, debía conocer estas movidas, ¿o será que le pasó la de ese expresidente con su paquidermo porque todo fue a sus espaldas? “Gracias Monseñor Rubiano por su oración: si a uno se le mete un elefante a la casa, lo ve”.

“La Embajada de Colombia saluda muy atentamente al Honorable Ministerio de Relaciones Exteriores de la República de Nicaragua, con ocasión de solicitar la renovación de residencia. Conforme a lo dialogado en pasadas reuniones en relación con el estatus de residente del señor Carlos Ramón González, el cual se encuentra en Nicaragua desde el pasado 5 de noviembre de 2024 y que desde esa fecha no ha salido del país”. Colombia solicitó apoyo al Ministerio de Nicaragua, “buscando que se renueve la residencia del compañero”, ya que, vencería el 14 de junio.

La himenóptera dijo: “a mí no me informaron, ni de la Embajada ni de ningún lado; el embajador para ese momento era Óscar Muñoz, coordinador de la UTL del exembajador León Fredy Muñoz”.

Comenzando julio, se profirió orden de captura, para cumplir la medida de aseguramiento de este bandido, ya que, es un peligro social y era muy factible que saliera del país y adivinen: se voló.

“El gobierno colombiano no ha solicitado a ningún país algún tipo de privilegio para Carlos Ramón González” maulló el gato, apoyado en la hormiga que dijo: “No participé ni recibí información alguna sobre trámites de residencia por parte de la Embajada en Nicaragua, circunstancia que se encuentra debidamente registrada en la trazabilidad de la entidad”.

Acá no pasa nada. Juguemos en el bosque mientras el lobo está… Y colorín colorado, este cuento no ha terminado, porque ese gato no sirvió.

Abrazo cálido, seguimos trabajando. @muiscabogado