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'Legión del afecto' marchó por las calles de Buenaventura en contra de la violencia

Delegaciones de varias regiones de Colombia marcharon por la ciudad con actos artísticos y muestras culturales.

28 de marzo de 2014 Por: Elpaís.com.co

Delegaciones de varias regiones de Colombia marcharon por la ciudad con actos artísticos y muestras culturales.

Cerca de dos mil personas, entre jóvenes y miembros de organizaciones humanitarias, marcharon este viernes por las calles de Buenaventura, con un mensaje de paz para pedir el cese de la violencia en el puerto. La marcha, denominada 'Un gran abrazo solidario para la paz de Buenaventura', inició a la 1:00 p.m. en la iglesia del barrio El Firme y recorrió las calles del municipio acompañado de mujeres cantoras, jóvenes malabaristas y zanqueros, así como de delegaciones de varias regiones de Colombia.Boris Velásquez, un hombre que llegó desde Bojayá, en el Chocó, afirmó que la idea es hacer "un llamado de no más violencia, que abandonemos las armas, que saquemos ese talento que tenemos, visibilicemos lo invisible y nos movilicemos como hermanos". El hombre, quien fue testigo de la masacre de Bojayá, ocurrida el 2 de mayo de 2002, envió un mensaje a los violentos de Buenaventura para que "vivamos en unión para que Colombia, que anhela tanto la paz, la consiga". Agregó que desde el Chocó "venimos con los brazos y el corazón abiertos para darles ánimo y seguir luchando por nuestro territorio. Acá estamos y acá nos quedamos". Como Boris, también llegaron a la marcha personas del Bajo Calima, zona rural de Buenaventura; el Magdalena Medio; Bogotá; Boyacá y barrios como Potrero Grande, en Cali. Al llegar al Parque Néstor Burbano, quienes participaron en el recorrido realizaron varias actividades artísticas y culturales. Fue el caso de las mujeres de negro y morado, quienes cantaron arrullos y alabaos para exorcisar la muerte que golpea al puerto."Vete lejos, anda, vete lejos, anda muerte criminal, anda muerte, vete lejos", cantaron mujeres afrocolombianas de Cartago durante todo el recorrido de la marcha por la paz, que llegó hasta las orillas de la bahía, hicieron este viernes las mujeres de Cartago, afrocolombianas como las de Buenaventura.Como ellas, también estuvieron en el puerto personas de varias regiones de Colombia: gente de Tumaco; Potrero Grande en Cali; Bosa, Soacha, Montes de María, Sincelejo, Cartagena, Catatumbo, Caquetá, Puerto Tejada; de la comuna 13 de Medellín; de Bojayá, del Bajo Calima, de Viento Libre, Miramar " y el Lleras en Buenaventura y otros muchos lugares donde la violencia, como en el puerto, ha dejado huellas profundas". María Rosmira, asistente a la marcha, dijo que con estos ritos ancestrales se busca visibilizar a las víctimas de la violencia. Un ritual por los cuerpos desmembrados encontrados en la bahía donde el mismo Defensor Nacional del Pueblo, que visitaba el puerto, acudió a verlos. "Esos muertos insepultos fueron rescatados por las madres cantando los alabaos del Pacífico colombiano", indicó Said, otro legionario del afecto, procedente de Bogotá."Con este acto en el mar de la bahía, que vamos a repetir en otras ocasiones, estamos hablando por los muertos, reclamando duelo", dijo María Rosmira. Por su parte, Donel Alzate, uno de los organizadores de la marcha, señaló que "la gente de Buenaventura debe saber que no están solos, vinimos a darles un abrazo de afecto y solidaridad por el respeto y el derecho a la vida. "Nos quisimos sumar los jóvenes a este dolor de puerto, profundamente conmovidos por los que están sufriendo acá", destacó Alex Sierra, del equipo coordinador de la Legión del Afecto, un grupo surgido hace 13 años en las comunas noroccidentales de Medellín. "Con este viaje a pie lo que buscamos es que jóvenes de todo el país vean sus propios problemas reflejados en los jóvenes de Buenaventura, estrechando lazos de amistad y buscando encontrarle salidas", precisó el dirigente.Mientras tanto, Alexis, otro legionario local, del barrio Lleras, donde surgió esta propuesta de Buenaventura, señala que esta marcha sirvió para demostrar que "los jóvenes no somo solo que les causamos tristeza a las madres o los que causamos daño, no, somos jóvenes que queremos recuperar la cultura de la vida".

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