Judicial
Campesinos encontraron siete cuerpos tras violentos enfrentamientos entre dos disidencias en Putumayo
Hace solo dos días una masacre enlutó este departamento.
Luego de combates entre las disidencias de las Farc ‘Carolina Ramírez’ de la Segunda Marquetalia y ‘Comandos de Frontera’ del Estado Mayor Central (EMC), fueron hallados siete cuerpos en alto grado de descomposición en zona rural de Puerto Caicedo. Varias imágenes confirman esta versión que evidencia el recrudecimiento de la violencia en este departamento.
Según líderes de la comunidad, la zona es de difícil acceso y las autoridades no tenían información del punto exacto en el que ocurrió este violento enfrentamiento, por lo que, al parecer, algunos pobladores han tratado de hacer el levantamiento de los cadáveres. Wilmar Madroñero, defensor de derechos humanos, contó a Blu Radio que la mayoría de los cuerpos siguen en la zona desde hace varios días.
El coronel Mauricio Acevedo, comandante de la Brigada 27 del Ejercito del Putumayo, dijo al mismo medio radial que la matanza sería consecuencia de una disputa por el control de los cultivos de coca. “Ahí no hubo enfrentamiento, fue una emboscada de los hombres exFarc que no se sometieron al proceso de paz contra unidades del grupo ‘Comandos de Frontera’, reveló.
Otras versiones indican que estas confrontaciones, al parecer, han dejado a su paso varios combatientes muertos, no solo en Puerto Caicedo, sino también en Puerto Guzmán y Puerto Asís. En la mayoría de los casos, estos cuerpos no pueden ser recuperados.
Campesinos de Puerto Caicedo, Putumayo, encuentran 7 cuerpos en alto grado de descomposición. Esto tras combates entre La Carolina Ramirez de la II Marquetalia, y Comandos de frontera del EMC. Ambos disidencias de las FARC. pic.twitter.com/IMhhDgmh1w
— Diana Coronado (@lacoronadation) September 20, 2023
En medio de este crudo panorama, la Red de Derechos Humanos del departamento de Putumayo alerta que las comunidades indígenas y campesinas han sido golpeadas por el desplazamiento. Versiones extraoficiales indican que alrededor de 30 personas se han desplazado desde Puerto Caicedo hacia Puerto Asís.
En zona rural de Puerto Asís, también se han registrado casos de desplazamiento. De acuerdo con una denuncia de la organización Amazon Frontlines, 24 familias del resguardo indígena Buenavista, en Puerto Silencio, se encuentran confinadas por la presencia de grupos armados.
Incluso, la Defensoría del Pueblo emitió una alerta temprana en la que advierte de restricciones a la movilidad de la población, vulnerable en medio de la disputa entre los grupos armados que se ubican en este territorio.
Masacre en Putumayo
El pasado lunes, 18 de septiembre, tres jóvenes entre los 17 y 20 años fueron asesinados con arma de fuego en la vereda Guaduales, específicamente en la vía que conduce a la variante San Francisco, en el municipio de Mocoa.
Una cuarta persona resultó herida en este hecho y, según se conoció, continuaba recuperándose este martes, 19 de septiembre. “El joven herido fue trasladado en primera instancia al Hospital de Mocoa, posteriormente, debido a la complejidad de su estado, fue remitido a la ciudad de Pasto”, informó la Policía Nacional.
El representante a la Cámara por Putumayo, Carlos Ardila, rechazó estos homicidios y exigió a las autoridades adelantar las respectivas investigaciones lo más pronto posible y esclarecer este crimen que genera temor entre la población civil.
“La nueva masacre en la vereda Guaduales, Mocoa, es inaceptable. Como representante del departamento del Putumayo, rechazo enérgicamente estos actos de violencia”, escribió a través de su cuenta de X (antes Twitter).
Datos de Indepaz indican que esta es la masacre número 65 que ocurre en el territorio nacional en lo que va de 2023. Además, el Instituto advirtió que en esta zona del país delinquen el frente ‘Carolina Ramírez’ y ‘Comandos de la Frontera’.
Hace menos de un mes, se registró otra masacre, en la que cuatro personas fueron asesinadas. Según reportaron las autoridades, el hecho ocurrió sobre las 9:00 p.m. del pasado 25 de agosto. Al parecer, las víctimas se encontraban consumiendo sustancias alucinógenas en zona boscosa del antiguo barrio San Fernando, donde fueron atacadas a tiros.