Lo mejor de la comida vallecaucana en un solo libro, deleitese

Recomendados de ‘Cali Provoca’, libro recién salido del horno, que hace un recuento exquisito sobre la cocina del Valle del Cauca.

[[nid:490635;http://contenidos.elpais.com.co/elpais/sites/default/files/imagecache/270x/2015/12/ep001064055.jpg;left;{}]]Sabiendo de la multiculturalidad que rodea a Cali, es lógico pensar que en la capital del Valle del Cauca se encuentren los mejores sabores de la gastronomía colombiana.

Justamente, ese concepto es el que quiere transmitir el libro ‘Cali Provoca’, una publicación de la Alcaldía de Santiago de Cali que busca promover en los comensales caleños la herencia indígena, afrocolombiana y local en su menú.

‘Cali Provoca’ presenta un viaje de más de 130 páginas en el que observarán lo mejor de los amasijos caleños, los platos fuertes más representativos, los dulces más originales y los mejores sabores de la ciudad, que le llevarán a descubrir ese pequeño mundo de la comida vallecaucana.

Por eso cuando se habla de la comida de Cali, necesariamente hay que referirse a la fusión de culturas, de sabores y tradiciones que nacieron del aluvión de personas que han llegado a la ciudad y han conformado una sociedad abierta y expuesta a toda suerte de influencias.

Las frutas de Cali La enorme variedad de frutas se ve en todas partes como protagonista de la vida urbana. Miles de personas salen a diario a ofrecerlas, listas ya para su consumo, enteras o en jugo. Piña, caimo, melón, limón,  naranja,  mango, lulo, grosellas, entre otras, brindan la posibilidad de endulzar los días de los caleños. Este es uno de los grandes patrimonios de Cali, capital de la salsa y del sabor que ofrecen sus frutas. ¿Necesita un lugar para comprarlas? Las galerías, los supermercados, y los vendedores que a diario hacen su vivir siempre tienen a la mano lo mejor de la fruta caleña. Marranitas y puerquitas La cocina tradicional colombiana, en especial la del Pacífico, se ha encargado de darle distintas formas y presentaciones al plátano. De hecho, el “fufú” se conoce como una masa de plátano verde cocido o tubérculo majado de origen africano. En el Valle se disfrutan como puerquitas o marranitas, que hacen parte del mecato tradicional de Cali. ¿Dónde probarlo? ‘Empanadas Don Raúl’, en el Barrio El Guabal. y ‘Vallunitos’, en Torres de Fenicia, brindan las mejores marranitas, que también se pueden disfrutar con un buen hogao. Arepas rellenas La arepa es un ícono cultural de la gastronomía colombiana. Su masa, a base de maíz blanco, amarillo, entre otros, se considera la responsable de darle cuerpo a este alimento popular en todas las familias. Una de sus virtudes está en su flexibilidad para disfrutarla a cualquier hora del día y con el tipo de carne que más le guste. ¿Dónde probarlo? ‘La Arepa de Doña Gloria’, ubicada en el histórico barrio El Templete, tiene dentro de su menú las mejores arepas. Desde pollo, carne, huevos de codorniz, entre otros, para disfrutar de una tradicional comida caleña. Tamales Vallecaucanos En el Valle suele hacerse el tamal de cualquier forma, bien sea si se cocina con dos o tres tipos de carne. La diferencia entre un tamal y otro  está en el hogao, el cual se considera el ingrediente principal que sabe conquistar a los visitantes que deciden averiguar en qué consiste el encanto de ciertos tamales llenos de historia. La masa puede ser la misma.   ¿Dónde probarlo? El restaurante Las Collazos en la carrera 44 #9C - 45 ofrece uno de los mejores tamales vallecaucanos, siendo el hogao su ingrediente principal y atractivo. 

[[nid:490638;http://contenidos.elpais.com.co/elpais/sites/default/files/imagecache/270x/2015/12/ep001064060.jpg;left;{}]]El Cholado 

El cholado es una bebida que lleva una rica variedad de frutas dulces y ácidas. Fue inventado en Jamundí por doña Rosina, madre de familia, que empezó a raspar un molde de hielo agregándole piña, limón y lulo con almíbares denominado “las tres niñas”, la primera versión un cholado.  ¿Dónde probarlo? Sobre las canchas panamericanas  está el ‘Cacique 4’ y el ‘Oasis’, dos lugares concurridos por los amantes de los cholados. Además, pueden visitar el Parque del Cholado en Jamundí, diagonal a la glorieta de bomberos y vivir la emoción de disfrutar los mejores cholados. Arroz atollado Del arroz atollado se pueden relatar diversas historias, ya que se trata de uno de los platos más representativos del Valle del Cauca y sus haciendas coloniales. En este plato, la variedad de carnes (costilla, carne de cerdo y longaniza) y su textura suave y única hacen que sea uno de los más solicitados en los restaurantes caleños. ¿Dónde probarlo? Los restaurantes de ‘La negra Ruby’ (puesto 320) y Beatriz Bejarano (puesto 403) ubicados en la Plaza de Mercado Alameda, ofrecen a los comensales locales e internacionales el mejor arroz atollado de la ciudad. Champús de arroz de Castilla Aunque  es de origen  español, hace algún tiempo forma parte del recetario tradicional de Buga, ya que integra ingredientes como la panela caucana, el lulo de Castilla, las hojas de naranjo agrio, que han construido la identidad culinaria, especialmente de Cali. Arroz, panela, lulo y piña manzana, entre los ingredientes, se suman en esta  deliciosa bebida. ¿Dónde probarlo? ‘Las Restrepo’, en la Avenida Roosevelt #27 -36. Para más información, puede comunicarse al +(57) 315 658 1437 DesamargadoEn las navidades  resulta muy común. Su elaboración se basa en desamargar limones, toronjas y naranjas, una práctica ancestral que ha sido propia de mujeres negras.  ¿Dónde probarlo? Stella Montaño en la plaza de Mercado Alameda y Esnera Figueroa en el Barrio El Troncal, dos opciones para disfrutarlo. LuladaAunque el lulo resulta muy apetecido por los caleños, crece de manera silvestre en los Andes. La lulada se diferencia del jugo tradicional porque lleva trozos del fruto y no se cuela. ¿Dónde probarlo? ‘Vallunitos’ en Torres de Fenicia y el restaurante ‘Candela’ en la Plazoleta Jairo Varela. 

[[nid:490642;http://contenidos.elpais.com.co/elpais/sites/default/files/imagecache/270x/2015/12/ep001064057.jpg;left;{}]]

Tostadas de plátanoEl plátano arribó a América en el siglo XVII sembrado con tierra en un barril. Más tarde, los negros lo adoptaron como un ingrediente de su cocina, siendo hoy uno de los ingrendiente más utilizados en los platos colombianos. ¿Dónde probarlo? ‘J&J Fritanga’ en San Antonio.