De Alkilados a dueños del swing, celebran su nueva producción

Por Daniela del Mar Peña.

Hace doce años un par de paisas empezaron a marcar tendencia, por los sonidos frescos y su innovadora fusión de sonidos pop y reguetón. Este año y después de más de una década de fusión y música, Alkilados cerró su travesía por el universo reggae con el álbum ‘Los dueños de la playa’.

“Doce años uno los ve como un número pequeño, pero en realidad es una sensación maravillosa y a la vez nostálgica. Es muy emocionante mirar atrás y recordar los conciertos, las presentaciones y el resultado de todo, en realidad, es la gratitud”, cuenta Lucho Torres, tecladista de la agrupación.

Para celebrar sus doce años de trayectoria, la agrupación pereirana presentó su más reciente sencillo ‘Dile que sin mí, dile que sin ti’, una canción que representa el regreso de la banda a sus raíces urbanas.

Juan Gálvez, más conocido como Juanito, la voz de Alkilados, considera que “volver a hacer algo con sonido reguetón, hace parte de nuestra historia, incluso en nuestra primera canción, son cosas que no nos tomamos a la ligera. Es muy especial volver renovados a nuestras raíces”.

Con el tiempo llegan nuevos ritmos y las plataformas van evolucionando. Y así también pasa con los músicos: después de tanto tiempo juntos, la agrupación atesora los aprendizajes que han podido adquirir en el camino.

“A veces miramos hacia atrás y decimos: ‘Eso que hacíamos tan gracioso’”, pero eso nos hace recordar nuestra esencia. De cada oportunidad, aprendemos y maduramos tanto profesional como personalmente; pero algo que se mantiene intacto en nosotros son las ganas de hacer música y de dar lo mejor en cada canción que presentamos”, dice Juanito.

El origen

En 2004, como resultado de un programa de extensión cultural de la Universidad Católica de Pereira, el docente Luis Torres inició un proyecto musical con varios estudiantes; sin saberlo, lo que empezó como un espacio para pasar el tiempo y crear música, se convirtió en una de las agrupaciones más importantes y representativas de Colombia.

En sus inicios, la banda se presentaba en bares y espacios culturales de Pereira, y todos los implementos que usaban para sus presentaciones eran alquilados. Por esta razón, la agrupación, de manera jocosa, decidió llamarse ‘Se arrienda’; sin embargo, al poco tiempo se dieron cuenta de que este nombre era difícil de encontrar en las búsquedas de internet.

El proyecto fue tomando cada vez más fuerza y en 2010 deciden llamarse Alkilados. “Nos mudamos a Alkilados, ya no tenemos ese problema de ser encontrados, pero la K es como kilo, de fuerza. Fuimos dando la vuelta al nombre y sí hay una filosofía detrás de todo eso, pero siempre hemos pensado que todo es alquilado”, cuenta Luis Torres.

Además de su peculiar nombre, la agrupación del Eje Cafetero impactó al público colombiano por la facilidad con la que hacen que sus canciones retumben en la mente de las personas, dejando en la escena los sonidos del ukelele fusionados con el flow del género urbano.

“Para nosotros la fusión es libertad, porque nos da la posibilidad de retarnos y de salir constantemente de la zona de confort, porque tiene uno la sensación de que puede hacer lo que quiere. El proceso ha sido enriquecedor, combinar ritmos nos ha permitido tener experiencias, conocer”, dice Luis Torres, o ‘Lucho’, como lo llaman dentro de la agrupación.

Una muestra de que su fórmula sí funciona es ‘Solitaria’, su primer gran éxito. “Esta canción tuvo un gran significado, porque de alguna manera ayudó a que los sonidos de la música urbana colombiana se acercaran al género pop”, manifiesta, Juan Gálvez.

Es esa misma libertad la que los ha llevado a realizar colaboraciones que jamás imaginaron. Con la filosofía de no presionar las situaciones, Alkilados recuerda con emoción cómo incursionaron en géneros que no eran su fuerte.

“Silvestre Dangond nos buscó para hacer una bachata (una nueva versión de Loco Paranoico), un género que ni él, ni nosotros habíamos hecho antes. Más que buscar artistas y pensarlo todo el tiempo, es un proceso que se da manera orgánica”, explica Luis Torres.

La agrupación, que con el tiempo se ha transformado en una familia, hace poco celebró 12 años de trayectoria en la ciudad donde nació, Pereira.

Una experiencia que les significó “volver a la raíz, ver los espacios llenos, las personas que se saben nuestras canciones, es de verdad sorprendente”, cuenta ‘Juanito’.

En su nuevo show se muestran como una agrupación más madura musicalmente y cada vez más unida, ya que la banda cree con firmeza que una de sus características ha sido crecer juntos; la mayoría de las personas que iniciaron en el proyecto, siguen.

“Antes estábamos en la universidad, pero, ahora en las pruebas de sonido vemos a nuestras esposas e hijos y esto demuestra que el proyecto va más allá de nosotros. Es muy lindo lo que nos regala la música”, dice Juan Gálvez.