Cine Colombia continúa celebrando sus 90 años, esto reveló su Presidente

De las satisfacciones más grandes que ha tenido en casi 30 años al frente de Cine Colombia, el vallecaucano Munir Falah Issa resalta una de las iniciativas con la que celebran este año las nueve décadas de la compañía: ‘La Ruta 90’. A través de este proyecto han llevado el séptimo arte a poblaciones vulnerables, distantes, a lugares donde muchos de sus habitantes jamás habían visto una película en la gran pantalla.

“Es difícil explicar con palabras lo que siente una familia o un niño cuando ve una película por primera vez en su vida en la pantalla grande. La sola expresión de alegría, la felicidad que proyectan es más de lo que uno quiere pedir”. Por eso, dice el bugueño, ‘La Ruta 90’ es “uno de los proyectos más bonitos que hayamos realizado”.

Para festejar los 90 años de la compañía sus directivos quisieron hacer una inversión social y volcarse hacia el público más vulnerable y necesitado del país. Para ello importaron equipos de última tecnología, los adaptaron en dos camiones distintos, con el fin que emprendieran rutas diferentes. La idea era visitar 90 municipios, pero ya van 110, y quieren terminar el año con 120 poblaciones visitadas.

Gracias a una alianza que hicieron con la Armada Nacional han arribado incluso, por vía fluvial o marítima, a poblaciones a las que es imposible llegar por vía terrestre.

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El diciembre La Ruta llegará, entre otros, a Paramijarú, un pueblo de La Guajira. Allí los esperarán niños y adultos de una comunidad wayuu a la que no solo les brindarán la grata experiencia de ver cine cómodamente sentados, sino que les llevarán regalos.

El empresario Munir Falah habló con El País sobre diferentes temáticas de la compañía que dirige con gran éxito desde hace, exactamente, 27 años.

¿Cómo llega usted a Cine Colombia?
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Yo estaba vinculado con el grupo Mayagüez, era vicepresidente financiero del sector siderúrgico y al mismo tiempo presidente encargado de la Corporación Financiera de Boyacá, una entidad que don Eduardo Holguín había adquirido. Cuando él compró Cine Colombia, que tiene unos lotes muy interesantes, los teatros quedaban en las mejores esquinas del país. Con el tiempo él no sabía realmente qué tipo de empresa había adquirido, entonces fue cuando me pidió que si podía ayudarle a entender qué era Cine Colombia, eso fue en 1990 y me trasladé a trabajar a esta compañía.

¿Cómo encontró la empresa?
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Nos encontramos con una compañía bastante rezagada en muchos aspectos, con una situación donde no había una mística, una cultura empresarial sólida en razón que llevaba muchos años en el Grupo Gran Colombiano, en la época en que se nacionalizó la banca y nos tocó emprender una reestructuración total e iniciamos un proceso que ha dado los frutos que hemos visto en los últimos años.

¿Cómo se escogen las películas que proyecta Cine Colombia?
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El 80 % de las películas que se proyectan pertenecen a los seis reconocidos estudios de Hollywood, ellos tienen oficinas en Bogotá y negocian las condiciones de exhibición con los teatros que existen en el país. Nosotros somos, a la vez, representantes de dos de esas casas: la 20th Century Fox y la Lions Gate. El otro 20 % son las películas escogidas por el equipo que asiste a distintos festivales de cine. Asistimos primordialmente a cuatro: el de Los Ángeles, el de Berlín, el de Cannes y el de Toronto. En esos se compran las películas independientes, es decir, de productores que no trabajan con los estudios de Holllywood.

¿Recuerda alguna película que usted creyó iba a tener gran acogida y resultó que no la tuvo en Colombia?

Hay muchas, muchas. Creo que el cine es un producto incierto, hasta que no se lance la película no se sabe realmente la acogida que va a tener. Para hablar de un promedio: de diez filmes que se lanzan al mercado solo tienen éxito comercial tres o cuatro.

¿Ha notado diferencias en el gusto de los espectadores acorde con la región geográfica donde vivan?
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Yo lo separaría en dos grupos. Las películas denominadas blockbuster o taquilleras, generalmente gustan en todas las regiones del país. De las 350 películas que se lanzan al año en Colombia, en promedio, las primeras diez en taquilla generalmente son familiares o infantiles. Las películas de corte más artístico, lo que se denomina cine arte, definitivamente su público es en Bogotá, Cali y Medellín. Nos ha costado mucho trabajo, a pesar de que las seguimos lanzando allá, que esas películas funcionen en las demás ciudades del país.

¿Ha pensado ampliar la oferta: ofrecer por ejemplo, más cine francés o italiano?
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La tenemos, pero no mucho italiano. Nosotros compramos muchas películas en francés, fácilmente lanzamos cerca de quince títulos por año. Las demás personas que compran películas para Colombia también traen cine francés. Internacionalmente hablando, el cine francés es el que más tiene acogida en Colombia.

¿Qué estrategias están empleando para atraer más público a las salas de Cine Colombia?
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Vale la pena resaltar, primero, que el crecimiento en la industria del cine en Colombia ha sido bien interesante. Si usted mira el 2006, por solamente hablar de una década, asistían en el país 20 millones de espectadores. El año pasado ya cerramos con 62 millones. Así que las estrategias son en crecimiento con nuevos proyectos y la atención al público. Todavía existe un campo importante para crecer en Colombia porque en los países desarrollados hay un percápita de asistencia de entre 4 y 5, es decir, por cada habitante se venden cuatro o cinco boletas.

En Colombia apenas estamos en 1.5, o sea, vemos que aún existe un campo para el crecimiento.

¿Qué parte del mercado tienen?
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Para hablarle en cifra redonda, nosotros representamos cerca del 45 % de la taquilla del país.

¿Cuáles son los días y horarios predilectos del público de Cine Colombia?

Entre viernes, sábado y domingo se recibe el 62 % de la asistencia. El resto de los días, el otro 38 %. El horario más importante es la vespertina, más que el nocturno. Y el día de mayor asistencia en el país son los sábados.

Cine Colombia se ha diversificado. ¿Hay otros campos a los que quieren llegar?
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Tenemos varios. En la sección de alimentos, por ejemplo, ya no se maneja solamente la confitería tradicional sino que ya tenemos barra de sushi, alianza con Juan Valdez, la tienda de dulces y recientemente, la tienda Alpina. La sección de boletería es totalmente independiente al cine, se llama Primera Fila, donde estamos atendiendo la venta de boletería de diversos espectáculos y eventos públicos en Colombia, primordialmente culturales. Ya incursionamos en el tema del deporte y estamos en muchos de los conciertos que llegan a Colombia. Tenemos la división de Distribución de Cine de las películas comerciales, pero también tenemos la División de Contenido Alternativo: son proyectos como el Ballet Bolshoi, la ópera del MET, el teatro de Londres, recorridos por los mejores museos, que se proyectan en la pantalla grande. Y acabamos de lanzar un producto muy novedoso con el que ya estamos saliendo de los teatros: sacamos la crispeta para el microondas.

Se está vendiendo en todas las salas de Cine Colombia del país. En menos de dos meses hemos vendido 300.000 unidades y próximamente se van a poder conseguir en los almacenes Éxito y Carulla.

¿Cuál es el tiempo que invierte usted en ver películas? ¿Lo hace a diario?

Los fines de semana generalmente voy con mi familia unas dos veces, o sea, vemos dos películas. Y entre semana, al mediodía me quedo mucho en la oficina y como tenemos una sala de proyección en el edificio me subo a ver cine. Y en los festivales de cine veo mucha película también. O sea que siempre son bastanticas las que logro ver.

¿Qué película lo ha hecho llorar?
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Son varias las que llegan al corazón. Ahora hay una película muy bonita, familiar, sobre un niño que nace con un defecto en su cara. Fue educado en sus primeros años por su madre (personificada por Julia Roberts), en la casa, por la situación. Y después, cuando entra a primaria deciden matricularlo en un colegio común y corriente y es el comienzo de esa etapa tan difícil del niño. Es muy bonita, se la recomiendo.

De joven, ¿qué tipo de películas veía en Buga? ¿Y en qué teatros?

Allí asistía a los dos principales: al Municipal y al María Cristina. Y no tengo un género en particular, yo trataba de ver de todo, siempre y cuando tuvieran buenos comentarios.

“La película más taquillera que ha habido en la historia del cine en Colombia fue una del año 2015, una familar, de acción: Rápido y Furioso”.

A Juanchaco y Ladrilleros llegó Cine Colombia con La Ruta 90 y exhibió la película animada ‘Un jefe en pañales’, sobre las aventuras de un pequeñín que nació para ser líder. Al finalizar de la proyección, tres niños se le acercaron felices a Daniel Montes Arboleda, gerente de Mercadeo de la compañía, a agradecerle y le manifestaron que ya sabían qué iban a ser cuando grandes: “empresarios”, al igual que el protagonista del filme.

“Eso es muy bonito, ver cómo el cine puede sembrar ilusiones y sueños en estos municipios que no han tenido tanto contacto con el mundo exterior.

Que los niños y adultos vean otras oportunidades que tienen de vida a través de la gran pantalla. Por eso las películas que escogemos están alineadas con mensajes positivos, de superación, para sembrar eso en las poblaciones”, reflexiona Montes.

Por experiencias como estas es que directivos y empleados en general de Cine Colombia quieren seguir trabajando con ahínco, para que, como dice su presidente Munir Falah, esta empresa siga por muchos años más como una de las más queridas de Colombia, aportándole al país a través de la cultura y del entretenimiento y le permita ver al mayor número de público posible no solo las mejores películas del mundo sino también los mejores espectáculos en vivo a través de la pantalla grande (ópera, teatro, ballet, etc).

Por eso, por lo pronto, para los próximos tres años Cine Colombia invertirá cien millones de dólares en proyectos de expansión, con cerca de cien pantallas de cine adicionales (hoy tiene 284) y en el fortalecimiento del área de contenido alternativo.