Cierran planta que fabrica Chiclets Adams en Cali

Según un comunicado de la compañía, esta es una medida irreversible para garantizar la sostenibilidad del negocio en Colombia. Cerca de 480 empleados afectados.

Mondel?z Internacional, antes Cadbury Adams, anunció el cierre de sus operaciones de la planta en Cali, el cual implicará la salida de 480 empleados entre operarios y personal de oficina. 

La planta en Cali, una de las más grandes en América Latina de esa multinacional, está ubicada en la Carrera 4 Norte # 64-10, del barrio Calima, al norte de Cali. 

La compañía y sus abogados convocaron a los empleados a un diálogo para los respectivos arreglos, reuniones que se celebraron en el Centro de Eventos Valle del Pacífico. En el sitio hubo protestas. 

Mondel?z es una compañía estadounidense con presencia en 165 países que aterrizó en el 2012 en la ciudad tras la compra de Cadbury Adams por parte de Kraft Foods. En Colombia, la empresa comercializa 14 marcas, entre las que se cuentan Oreo, Motitas, Sparkies, Halls, Chiclets Adams, Bublicious, Trident, Bubbaloo, Certs y Club Social.

La multinacional dejará de fabricar productos de la categoría de ‘snacks’ y otras golosinas semisólidas en su planta del barrio Calima. Dicha producción será trasladada a México. Sin embargo, aseguró en un comunicado de prensa que “continuará en el mercado con un portafolio de productos en las categorías de gomas de mascar, caramelos, galletas y bebidas en polvo” y mantendrá su operación comercial en la ciudad con 500 personas. Bogotá seguirá la oficina central de operaciones para el área andina y América Central. 

La empresa anunció el cierre parcial de su planta este martes argumentando problemas de rezago tecnológico y caída sostenida en el volumen de su producción desde el año 2008. 

"A pesar de los esfuerzos e inversiones que hizo Mondel?z International desde que adquirió la planta de gomas y caramelos en Cali, los rezagos tecnológicos que ya arrastraba, sumados a las tendencias adversas del mercado, han llevado a una caída sostenida del volumen desde el año 2008, al punto que hoy la ocupación de la planta es sólo del 56% de su capacidad total, situación que hace inviable su operación”, manifestó Francisco Espinosa, Director de la Cadena de Abastecimiento de Gomas y Caramelos de esta compañía para América Latina. Indicó que "esta es una medida necesaria e irreversible para garantizar la sostenibilidad del negocio en Colombia”.  

De acuerdo con un informe de la Superintendencia de Sociedades, la empresa registró ventas por $419.669 millones en 2014, superiores a los $362.529 millones del 2013, pero reportó pérdidas por $30.703 millones.

El gerente de la empresa, Julián Flórez, se abstuvo de entregar declaraciones a los medios acerca de la decisión adoptada por la compañía.  La empresa afirmó que se solicitó el permiso requerido para la terminación de los contratos individuales al Ministerio de Trabajo y le ofreció a los empleados despedidos un plan de retiro voluntario que implicará algunas indemnizaciones de acuerdo al tiempo laborado por cada trabajador.   Arley Marmolejo, presidente del Sindicato de Cadbury Adams, consideró como "injusto" y "un atropello" las ofertas presentadas a los trabajadores ya que muchos de ellos llevan en la empresa entre diez y 30 años, lo cual los deja sin posibilidades de un nuevo trabajo y de una jubilación.  Jesús Ernesto Rojas, presidente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Industria de Productos Grasos y Alimenticios, Sintraimagro, dijo que “la obsolescencia en los equipos de producción es culpa de la propia empresa y no de los trabajadores”. Sostuvo que la estrategia de clausurar operaciones “era algo premeditado porque la empresa sí es rentable”. Asimismo, anotó que "la pérdida de mercados que aduce la compañía es culpa de una mala planeación”. A raiz de la decisión de la multinacional, los trabajadores se declararon en asamblea permanente y anunciaron que en las próximas horas levantarán carpas en los alrededores de la factoría como una forma de protesta.  La oficina regional de trabajo no se pronunció frente al despido de los empleados ni acerca de los términos que motivaron la decisión de la empresa.  

Otros cierres Lo sucedido con Mondelez se suma a otros cierres que han causado mucha preocupación en el empresariado local. Los últimos fueron los de  las plantas de la multinacional farmacéutica Bayer e Icollantas-Michelin, esta última fabricante de llantas y neumáticos. Bayer se retiró de Cali el 10 de julio del 2013 y mudó su producción a Centroamérica. La decisión implicó el despido de 100 trabajadores.  La compañía fabricaba en la ciudad, Aspirina, Alka Seltzer y las cremas Canesten, entre otros productos. Un mes antes de dicho cierre, la multinacional francesa Michelin había adoptado igual decisión. El 13 de junio del 2013 clausuró operaciones en su vieja planta del barrio San Nicolás.  La empresa retiró a 1000 operarios. En los años 80 empresas  industriales como Gillette, Fruco y Croydon se fueron de la ciudad, argumentando baja rentabilidad y altos costos de producción.