Alas de Colombia, única exportadora de mariposas vivas del país, recibe el Premio CorfiSostenible 2025

En medio de una crisis productiva marcada por el clima, los derrumbes, la inseguridad y las dificultades laborales, la empresa vallecaucana Alas de Colombia, Mariposas Nativas Ltda., encontró un nuevo impulso para seguir volando.

Su proyecto de Zoocría de Mariposas para Biocomercio Sostenible fue reconocido con el Premio CorfiSostenible 2025 en la categoría Biodiversidad y Medio Ambiente, consolidándola como un referente nacional en innovación, sostenibilidad y emprendimiento con enfoque social.

“Este reconocimiento llegó como una bendición en un momento muy difícil para nosotros”, contó la representante de Alas de Colombia, Vanesa Wilches.

Y agregó: “Nos devuelve la esperanza y nos impulsa a seguir adelante con este sueño que comenzó con la idea de darle alas a las comunidades campesinas del Valle del Cauca”.

Un modelo de negocio con alas propias

Desde su sede en Palmira, Alas de Colombia se dedica a la zoocría de mariposas vivas, una actividad que combina la conservación de la biodiversidad con la generación de ingresos sostenibles para comunidades rurales.

La empresa es la única en Colombia que exporta mariposas vivas al mercado internacional, enviando pupas a mariposarios de exhibición en países con estaciones climáticas, donde estos coloridos insectos se convierten en atractivo turístico.

“Trabajamos principalmente con mujeres cabeza de hogar y familias campesinas”, explicó la fundadora.

“Ellas son quienes crían las mariposas, cuidando cada etapa de su metamorfosis, mientras nosotros gestionamos la comercialización y exportación. Es un trabajo que transforma vidas y demuestra que la sostenibilidad puede ser también un camino de inclusión”. dijo.

Además del componente exportador, la empresa ha innovado con productos simbólicos como Maripupa®, una pequeña caja que contiene una pupa lista para nacer. El día que la mariposa emerge, quien la recibe le pide un deseo antes de dejarla volar. Esta propuesta, registrada como propiedad intelectual, se ha convertido en un emblema del emprendimiento vallecaucano y una herramienta educativa y emocional que conecta al público con la naturaleza.

Sostenibilidad con propósito

El modelo de Alas de Colombia se estructura en dos frentes. El primero, enfocado en la comercialización internacional, integra prácticas de biocomercio sostenible y fomenta la regeneración de ecosistemas locales mediante la conservación de plantas hospederas. El segundo impulsa la creación de artesanías con alas de mariposas que han completado su ciclo de vida, un proceso que evita el desperdicio y promueve la economía circular.

Estas piezas artesanales son elaboradas por mujeres rurales del corregimiento de Tenjo y otras zonas de Palmira, generando ingresos complementarios y fortaleciendo el tejido social. Por sus buenas prácticas, el proyecto cuenta con el sello de Negocios Verdes, otorgado por la CVC y el Ministerio de Ambiente.

Reconocimiento nacional

El Premio CorfiSostenible, impulsado por Corfi y su Fundación, recibió este año 114 propuestas de todo el país. Durante la ceremonia de premiación, realizada en Bogotá, la presidenta de Corfi, Milena López Rocha, destacó que la sostenibilidad debe ser un eje de competitividad empresarial y un motor de cambio social.

Por su parte, Lina María Mondragón, directora ejecutiva de la Fundación Corfi, subrayó que estos reconocimientos buscan identificar oportunidades de valor compartido en las cadenas productivas. “Fortalecer las redes sostenibles impulsa la innovación, la competitividad y el desarrollo económico en los territorios”, afirmó.

Alas de Colombia sobresalió por su impacto ambiental y social, al demostrar que la conservación puede ser también una fuente de prosperidad. Su historia es ejemplo de cómo un emprendimiento nacido en el corazón del Valle puede trascender fronteras, transformar comunidades y llevar el nombre de Colombia más allá de los trópicos, con cada mariposa que emprende vuelo hacia el mundo.