¡San Camilo! Con un golazo de Vargas, Deportivo Cali rescató un empate ante Millos

En el último suspiro, cuando la esperanza abandonaba a los azucareros en el estadio de Palmaseca y la afición se retiraba masticando lo que parecía ser una dura derrota, apareció la cabeza salvadora de Camilo Vargas para rescatar un punto y desatar una prolongada euforia en el escenario de los verdiblancos.

Era la última jugada del partido. El reloj marcaba los 92 minutos y fracción. El Deportivo había forzado un tiro de esquina. Era su última esperanza, la única opción que aparecía sobre la cancha.

Era ir a todo o nada. Arriesgar hasta los muebles. Igual, solo quedaban segundos. Después de ese cobro no había más chances. Por eso Camilo Vargas miró hacia el banco y de allí recibió el 'guiño' para pescar en río revuelto. Para meterse en medio de tantas camisetas blancas (así jugó Millonarios) y verdes del Cali.

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Y vino el cobro de Déiber Caicedo, y apareció atacando el balón y casi en el primer palo Camilo Vargas, como si fuera un 9 de raza, se puso el traje de salvador y con un perfecto cabezazo la mandó al segundo palo para convertirse, ese gol, en uno de los más festejados por aquellos hinchas que nunca perdieron la fe.

Y en la cancha los jugadores también lo celebraron como si fuera el gol de una final. Todos con Camilo. Euforia en el Palmaseca. Alegría por todos lados. El Cali festejaba, mientras los jugadores visitantes parecían aturdidos porque les habían sacado los tres puntos del bolsillo en el último suspiro.

Millonarios se había puesto en ventaja a los 57 minutos con un tiro penal de Elíser Quiñones, previa falta dudosa de Richard Rentería sobre Roberto Ovelar.

El primer tiempo entre verdes y azules fue bajo en cuanto a producción futbolística. Solo en el remate de esa etapa inicial se presentaron dos opciones de gol, ambas para Millonarios y con el mismo protagonista, Juan David Pérez, quien perdió ante Camilo Vargas.

En el periodo complementario hubo más compromiso de ambos equipos, haciéndose más incisivo el Cali con un cabezazo de Juan Ignacio Dinenno a los 51 minutos que atajó Wuilker Fariñez, y un minuto después otro cabezazo, esta vez de Danny Rosero, que dio en la parte externa de la malla.

A los 55 se dio la jugada poco clara entre Rentería y Ovelar que fue sancionada como penal, haciéndola efectiva Elíser Quiñones con un potente remate que dejó sin opción a Camilo Vargas.

Los capitalinos tuvieron otras opciones que no concretaron el mismo Quiñones y Roberto Ovelar a los 61 y 72 minutos.

Millonarios se quedó con un hombre menos a los 68 por expulsión de Felipe Jaramillo, y se creía que el Cali aprovecharía esa situación, pero no estuvo fino en muchos pasajes del encuentro.

Hasta que llegó esa acción del minuto final. Tiro de esquina y al área visitante se fue Camilo Vargas para tratar de salvar los muebles.

Y el arquero alcanzó lo que parecía difícil. Se abalanzó sobre ese balón que salió del botín de Déiber Caicedo y con un perfecto cabezazo puso el 1-1 que le devolvió la alegría y la esperanza al equipo y a la afición.

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