Natalia Hurtado García, la nueva joya de la gimnasia rítmica en Colombia

La gimnasia rítmica es una de las disciplinas deportivas más estéticas y bonitas que combina elementos de ballet y danza, acompañados de música, piezas que convierten sus rutinas en coreografías hermosas.

En Colombia, este deporte data desde el año 1940, cuando el sacerdote italiano Mosser, quien se radicó en Bogotá en el Colegio Salesiano León XIII, empezó dirigiendo grupos de jóvenes de excelente calidad.

En la actualidad, las boyacenses y antioqueñas dominan a nivel nacional, aunque hace solo una semana una vallecaucana sobresalió en el Campeonato Nacional Juvenil que se celebró en la capital del Valle, robándose los elogios de los especialistas.

Se trata de Natalia Hurtado García, amplia dominadora del evento nacional con puntajes sobresalientes.

A sus 14 años comienza a perfilarse como la nueva joya de la gimnasia rítmica colombiana.

Llegó a este deporte hace cuatro años por la inspiración de su madre, Andrea, quien practicó la disciplina hace algún tiempo y se ha convertido en un punto de referencia y mejor consejera.

Aunque trató de incursionar en el nado sincronizado, el futuro de Natalia estaría lejos de la piscina y cerca de la cuerda, el aro, la pelota, las mazas y la cinta, los aparatos que caracterizan la gimnasia rítmica.

“En un comienzo todo empezó como un pasatiempo, pero con el correr de los años ya se ha convertido en algo de mayor dedicación y esfuerzo. Siempre quise meterme en la gimnasia, como no se pudo inicialmente, lo más parecido era el nado sincronizado y ya después de un tiempo se hizo el cambio”, comentó la atleta caleña.

De la mano de su entrenadora, la japonesa Chihiro Inomata ha logrado una comunión perfecta con los aparatos para lograr rutinas impecables.

“Cuando estoy compitiendo me siento más segura con las mazas que con los otros aparatos. Sin embargo, soy una gimnasta que me preparo para hacer ejercicios limpios sobre la pista con los otros elementos”, agregó Natalia.

A su corta edad, la deportista vallecaucana ha cambiado la rutina del día a día de una joven de sus años.

La disciplina es la principal condición a esta altura de su vida por los compromisos adquiridos no solo en el deporte, sino en su formación escolar.

Adelanta el noveno curso en el Colegio Comfandi, en la sede El Prado, y sabe que debe rendir en ambos campos para ser sobresaliente no solo como profesional, sino en lo personal.

Dice que se inclinó por la gimnasia rítmica en lugar de la artística porque las considera más elegante, más bonita y su modo de ver tiene cosas interesantes que la enamoraron desde que conoció de la disciplina.

“Cantar el himno del Valle fue emocionante”
Para cualquier atleta su mayor satisfacción en cualquier disciplina es poder subirse a lo más alto del podio y entonar las notas del himno de su país o de su departamento en este caso.

Eso fue lo que vivió Natalia en el pasado Campeonato Nacional Juvenil cuando fue la gimnasta más laureada del certamen.

En esa oportunidad estuvo de local, por lo que contó con el apoyo de su familia desde las gradas del coliseo El Pueblo de la capital del Valle.

En cada rutina recibió el apoyo de los suyos para que sus esquemas fueran los mejores y así sucedió. Natalia se convirtió en la mejor de la categoría juvenil, a pesar de estar dos años por debajo de la edad requerida y rompió la hegemonía de otros departamentos que tradicionalmente han sido los mejores en los últimos años.

“Fue muy lindo escuchar el himno del Valle del Cauca estando en lo más alto del podio. Poderlo cantar con todo el sentimiento genera un gran orgullo. En otras ocasiones me ha tocado ver que deportistas de otras delegaciones se suban al primer lugar y escuchar otros himnos, no es tan bueno”, indicó.

La actuación de la gimnasta juvenil sirvió además para que el departamento ganara por equipos, otro hecho que la llena de satisfacción por aportar en logros colectivos.

Su meta es seguir fortaleciendo su carrera. Anhela con llegar al seleccionado nacional de mayores y competir contra las mejores del mundo.

Su primer paso por ahora es poder asistir al Panamericano de la especialidad que se hará en el mes de junio en México y lograr un cupo al Mundial de Rusia que se hará en corto tiempo. Aunque sus padres hacen un llamado para que Natalia pueda tener el apoyo y respaldo de las entidades públicas y privadas, y poder desplazarse a suelo azteca donde tendrá su primera experiencia internacional.

Lleva un buen proceso
Los resultados de Natalia en el Nacional Juvenil no son producto del azar.

Los cuatro años que lleva la deportista en la Liga de Gimnasia del Valle del Cauca comienzan a dar sus frutos.

Su mentora, la profesora nipona Inomata, no se ahorra en sus palabras a la hora de ponderar las condiciones técnicas de la reina de la gimnasia juvenil en el país.

“Es una gimnasta muy inteligente que se exige altamente. Destaco mucho de ella que es una persona íntegra, con altos valores humanos. Por fortuna ganó el título nacional juvenil poniendo en práctica todas las recomendaciones que se le hizo y aplicando lo que se ha trabajado en el último tiempo”, expuso la entrenadora Inomata.

Natalia se destaca por trabajar muy bien con los aparatos a la hora de enfrentar las rutinas. De acuerdo con Chihiro, si continúa con el mismo ímpetu y ganas, se va a convertir en poco tiempo en la mejor exponente de la disciplina en nuestro país.

Un deporte de muchos sacrificios
Para sobresalir en la gimnasia o en cualquier otro deporte se requiere de una alta cuota de disciplina y sacrificio, no solamente para el deportista, sino para su familia.

En el caso de Natalia, ella sueña con estudiar administración de empresas en el extranjero y para ello debe esforzarse al máximo en todas las esferas donde se mueva.

“La niña nunca ha sacrificado sus estudios. A nosotros, sus padres, nos toca multiplicarnos para apoyarla en este camino. Nos toca recogerla al mediodía cuando termina clases, llevarla a la casa para que almuerce, se aliste y pueda estar a tiempo en los entrenamientos en la Liga del Valle. En el coliseo está hasta las 8:00 p.m., muchas veces llega a hacer tareas y al otro día vuelve y juega la misma situación. No ha sido un proceso fácil, pero tenemos toda la convicción del mundo para acompañarla en este camino porque vemos que los resultados se van a dar de forma positiva”, apuntó Fabio, su padre, quien labora como asesor en el sector de la salud.

Su madre, la inspiradora de los sueños de la atleta como gimnasta, labora en el área del servicio al cliente de una EPS en nuestra ciudad.

Un hogar de estrato medio que lucha por salir adelante y que con muchos esfuerzos quieren darle todas las herramientas a Natalia para que alcance sus sueños.

En los momentos de triunfos no olvida a las personas que la han apoyado en este corto, pero exitoso camino.

“Cuando ganó se me viene a la mente aquellas personas que están siempre junto a mí en todo momento. Mis padres, mis entrenadores, mis amigas y es algo que me motiva para trabajar duro, porque sé que cuando uno trabaja bien, las cosas salen de la mejor manera”, acotó Natalia.

Ella, junto a su familia, busca ser becada por la Liga del Valle o recibir el respaldo como deportista apoyada para continuar con sus entrenos y competencias sin problemas.

“Espero tener un apoyo prontamente. Cuando se dan competencias nacionales o ahora que está la oportunidad de ir al Panamericano, son mis padres los que les toca asumir los gastos y por lo general son costosos. Cuando tienes respaldo, las cosas se hacen más fáciles”, concluyó la deportista vallecaucana.

Datos
En el Nacional de Gimnasia que se llevó a cabo en Cali, Natalia Hurtado se impuso a las antioqueñas Luna Henao y Salomé Ricaurte.

En la general individual del certamen, la juvenil vallecaucana realizó un puntaje de 44.167.

El certamen reunió a las 38 mejores gimnastas del país, de los departamentos de Antioquia, Boyacá, Norte de Santander, Risaralda, Tolima y Valle del Cauca.