Reforma Tributaria: ¿Le harán ajustes al impuesto de las bebidas azucaradas?

Las discusiones sobre el proyecto de reforma tributaria avanzan en las comisiones económicas del Congreso de la República, aunque todavía no analizan otros temas álgidos como el controvertido impuesto a las bebidas azucaradas.

Como lo plantea el texto de la reforma, la idea es gravar las bebidas saludables, es decir ponerle un impuesto nacional a las bebidas azucaradas y a los alimentos ultraprocesados, entre ellos las bebidas a base de fruta en cualquier concentración, zumos, néctares de fruta, mezclas en polvo, bebidas azucaradas, energizantes, saborizadas, gaseosas, refrescos y aguas endulzadas o saborizadas, a base malta y las de tipo té o café.

Algunos economistas y consultores empresariales coinciden en señalar que un impuesto de esa naturaleza afectará los hogares de menores ingresos, por lo tanto dejan entrever la posibilidad de que se baje la tarifa o que algunos productos no sean gravados.

Carlos Andrés Pérez, economista y consultor empresarial, explicó que los análisis hechos por universidades, centros de investigación y gremios -sobre los efectos adversos de la reforma tributaria propuesta por el Gobierno- han dejado en evidencia que el ambiente para los negocios, la atracción de inversión y el emprendimiento se verían seriamente amenazados por cuenta del alto nivel impositivo que tendrían las empresas e inversionistas.

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De otra parte, varias evaluaciones han mostrado también los efectos regresivos sobre los hogares, es decir que en términos relativos los hogares de menores ingresos tendrían un mayor aumento en el pago de impuestos frente a los de mayores ingresos, esto, por cuenta de los llamados impuestos saludables. “Es previsible que algunos de estos productos no sean gravados o que las tarifas aplicadas sean mucho menores para mitigar este efecto”, indicó Pérez.

Por su parte, Carlos Sepúlveda, decano de Economía de la Universidad del Rosario, opina que es razonable el debate que se está dando sobre la reforma tributaria y la posibilidad de ajustar la propuesta hacia un recaudo menor, para que tenga un menor impacto en la afectación de familias pobres o vulnerables, así como también en el costo de capital y la inversión.

“No me preocupa que resulte una reforma tributaria con un monto menor a los $25 billones en el primer año, creo que se puede esperar eso, pero lo importante es que quede una propuesta balanceada que no afecte la inversión y la creación de empleo, así como el bolsillo de los hogares más pobres o vulnerables”, explicó.

Sin embargo, recordó que se trata de una propuesta sobre mayores tributos, y sin lugar a dudas, tendrá que afectar a algún segmento de población.

Uno de los puntos más polémicos tiene que ver con la modificación de las tarifas de impuestos a los dividendos. De acuerdo con el articulado, el Gobierno propone cambiar la tarifa de 10% para los dividendos por las tarifas marginales de la tabla general, que van desde 0% hasta 39% para aquellos de ingresos más altos.

Mientras que para las ganancias ocasionales, el Ministerio de Hacienda también busca cambiar la tributación de 10% para herencias, donaciones y enajenación de activos y de 20% para rifas y loterías por estas mismas tarifas marginales de los ingresos ordinarios.

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Sin embargo, el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, dijo que se sigue discutiendo esta propuesta sobre los dividendos por la preocupación de lo que pueda generar en la inversión, por lo que desde las comisiones económicas del Congreso se propone que haya otro mecanismo.

“La propuesta es que haya otra forma de ponerles impuestos a los dividendos, porque consideran que la propuesta del Gobierno para una persona muy rica puede llegar a tasas de tributación muy altas", dijo el ministro Ocampo a su salida de las reunión con las comisiones económicas.

Pero también se han dado a conocer otras propuestas desde el Congreso. La representante a la Cámara Carolina Giraldo Botero propuso al ministro Ocampo agregar el tabaco y los vapeadores dentro de la reforma tributaria, por su efecto en la salud.

La representante aseguró que el imponer el impuesto aumentaría la recaudación nacional en $1 billón, además de agregar el propósito de reducir el consumo y disminuir la inversión en el tratamiento de enfermedades provenientes de estos productos.

El representante a la Cámara por Putumayo, Carlos Ardila, también presentó 23 propuestas frente al proyecto de Ley de Reforma Tributaria que radicó el gobierno. De acuerdo con el representante, solo deberían pagar impuestos las pensiones más altas desde $7,5 millones mensuales y no desde $5,6 millones cómo propone el Gobierno