Carmen Andrea Rengifo, la periodista caleña que sobrevivió a la furia chavista en Venezuela, cuenta su historia

El 5 de marzo del 2013, cuando falleció Hugo Chávez, la periodista caleña Carmen Andrea Rengifo Gómez se desempeñaba como corresponsal de RCN en Caracas (Venezuela), por lo que se dirigió al Hospital Militar a cubrir la noticia que daba vuelta al mundo. Pero ese día, por cuenta del fanatismo político, su vida cambiaría para siempre. Mientras Carmen y su camarógrafo transmitían desde las afueras del lugar donde custodiaban el cuerpo de Chávez, una turba enfurecida de chavistas los atacó en un claro intento de linchamiento.

“Nos pegaron con cascos, con palos, hombres, mujeres, gente adulta y nos fueron arrinconando a las casas. Después yo no sé cómo logramos salir de ahí. Al camarógrafo lo tumbaron dos veces. Lo golpearon muy fuerte, pensé honestamente que lo habían matado. Cuando lo vi, un motorizado lo sacó de allá”, dijo la periodista en su momento.

Al poco tiempo, después de 8 años como reportera en Venezuela, la salud mental de la comunicadora colapsó y fue diagnosticada con estrés postraumático, esto la obligó a salir del país y alejarse del periodismo durante algunos años, en los cuales, instalada ya en España buscó en la lectura y la escritura una forma de recuperar la calma en su vida.

De su proceso de sanación y de un proyecto de escritura que realizó para un Máster de Creación en la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona, surgieron los diferentes textos (testimonios, crónicas, microrrelatos, poesía en prosa y aforismos) que conforman ‘Las sombras rojas’, su primer libro, que será presentado por su autora hoy en Cali, a las 6:30 p.m. en el auditorio ‘José Fernando Arroyo Valencia’ de la Escuela Nacional del Deporte (Calle 9 No. 34-01).

Con ‘Las sombras rojas’, Carmen Andrea Rengifo ganó en 2021 el Concurso del Programa Nacional Estímulos del Ministerio de Cultura, como obra inédita escrita por mayores de 28 años. La autora visitó su ciudad natal, con motivo del lanzamiento de su libro, y habló con El País.

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En 2002, Carmen Andrea Rengifo ganó el Premio Simón Bolívar de Periodismo por una crónica realizada para Telepacífico.

¿De dónde viene el título del libro?

Cuando estaba haciendo el Máster de Creación, me dicen de qué vas a escribir, y yo no sabía qué tipo de narrativa escoger, si algo periodístico o literario. Me recomendaron que tratara de no escribir nada sobre Venezuela, pero igual yo quería hacerlo de otra forma, como hablar de lo que viví allá sin mencionarlo. Y así empezaron a salir los textos. Lo que tuve claro desde el principio es que todo lo que tenía en mi mente sobre lo experimentado en Venezuela, estaba rodeado de oscuridad, muerte, como sombras. Tenía la sensación de que siempre había algo que me perseguía, quizá eso era efecto del estrés postraumático, el tener siempre miedo. Y después identifique el rojo, porque es un color que a mí me gusta mucho y debí guardar cuando viví en ese país, para que no me señalaran de chavista, y es el mismo rojo el que me agrede, una turba de rojo. Entonces hay allí un juego de palabras que de algún modo aparecen en libro.

¿Cómo fue el proceso de enfrentar sus miedos a través de la escritura?

Leer y escribir me salvó, aunque yo ya tenía el hábito de escribir sueños, pero fue cuando comencé a estudiar que entendí todas las posibilidades que tenía la escritura. Siempre escribía en mi trabajo periodístico, pero hasta ese momento no conocía que podría ser terapéutico. Recuerdo que la persona que me recomendó estudiar el Máster de Creación, me dijo: “Así tú no publiques, te vas a dar cuenta que escribir es sanador”. Y efectivamente, mi intención no era publicar, sino aprender a soltar todo lo que tengo en mi interior. Además este proceso me permitió leer mucho, lo que también me ha ayudado, porque muchas veces por nuestro trabajo no tenemos esa posibilidad. Gracias a la escritura ahora estoy muy conectada con mi interior, y siento que así puedo resolver muchos conflictos que tengo guardados, me ayuda a salir de la oscuridad.

A 20 años de haber sufrido ese ataque en Caracas, ¿cómo analiza hoy esta tipo de violencia fomentada por el fanatismo político?

Lo que pasó en ese momento fue sin duda producto de la polarización política, y en la agresión influyó que el gobierno, Chávez y sus representantes, lo que hacían era señalar a la prensa crítica e independiente como sus enemigos, y eso nos expuso al odio de sus seguidores. Si tú les dices a unos fanáticos hagan esto o lo otro, en una situación de esas corres mucho peligro. Era obvio que había un ataque sistemático a la prensa en Venezuela, y ese día se juntó todo, el odio y con el duelo por la muerte de su líder. Y aquí, en Colombia, puede estar pasando lo mismo, porque estamos en un momento complicado, también de mucha polarización, donde los periodistas enfrentamos alto riesgo.