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Falsificación de planos, el nuevo lío que afronta polémico conjunto residencial en el sur de Cali

Planeación avaló construir siete torres, pero la Curaduría expidió licencia con un plano en el que aparecen once

29 de marzo de 2015 Por: Unidad Investigativa | El País

Planeación avaló construir siete torres, pero la Curaduría expidió licencia con un plano en el que aparecen once

[[nid:407020;http://contenidos.elpais.com.co/elpais/sites/default/files/imagecache/563x/2015/03/conjunto-tremanso-de-la-colina.jpg;full;{Actualmente están suspendidas las obras en dos de las torres por estar ocupando espacio público. Dos más han quedado ubicadas parcialmente sobre zona en régimen diferido, según el plano. Foto: Jhonatan Herrera | Elpais.com.co}]]

Invadir  el espacio público, construir sin licencias ambientales o edificar en zona prohibida, como lo denunció El País en la edición del 9 de noviembre del 2014,  parecen solo faltas menores frente al nuevo señalamiento que afronta el  constructor del proyecto Remanso de la Colina, que se levanta en un  exclusivo sector en el sur de Cali. Lea también: Suspenden polémica construcción al sur de Cali por falta de licencias

El pasado 29 de noviembre, Planeación Municipal instauró ante la Fiscalía una denuncia contra el arquitecto  Pablo Aldana, representante de Espacio Vital Constructores,  por presunta  falsedad en documento público porque se habría alterado el plano con el que la Subdirección del POT dio viabilidad a la obra.

Señala en la denuncia  la abogada Trinidad Baeza, quien actúa en nombre de Planeación, que el constructor solicitó en marzo del 2014 un concepto normativo para el proyecto Remanso de la Colina y ocho días después se dio viabilidad al Plano 2/14, que contemplaba la construcción de siete torres, pero en un control que hizo la Subdirección de Ordenamiento Urbanístico encontró que el plano con el que la Curaduría le otorgó la licencia al proyecto era distinto al que avaló la Subdirección del POT.

“En el plano se aprueba la construcción de siete torres en área urbana y un pequeño porcentaje en suelo rural, mientras que en el plano con el que se tramitó la licencia de urbanismo que reposa en la Curaduría Urbana No. 1 se observa que el porcentaje  de suelo urbano es menor... y en este se   observan  once torres, configurándose una falsedad en dicho plano”, dice la denuncia.

 Sobre la presunta irregularidad, el director de Planeación Municipal, León Darío Espinosa, explicó que al verificar que el plano no correspondía al aprobado se interpuso la denuncia. “No sabemos en qué estado está la investigación. No es una denuncia propiamente contra el constructor sino para que se investigue por parte del ente de control si hubo alguna falsedad en documento público. No somos la entidad competente para  manifestarnos,  pero sí sabemos que el trámite que se surtió en Curaduría inicialmente llevaba un plano que no era al  cual  Planeación se había referido”.

En su defensa el constructor, el arquitecto Pablo Emilio Aldana, aseguró que esos señalamientos son totalmente falsos. “Nosotros presentamos a Planeación y a Curaduría lo que nos aprobaron y de hecho en este momento la licencia  está por las siete torres”.

“Eso fue una equivocación, que se colocó un plano allí que no era, pero eso está totalmente aclarado tanto ante la Curaduría como ante Planeación”, indicó el constructor, al señalar una  presunta “presión política” detrás de la denuncia que instauró Planeación Municipal.

“Lo que está en este momento aprobado por Planeación y por la Curaduría es lo que se está construyendo, que son las siete torres”, dijo el arquitecto al agregar que aún no se ha logrado determinar de dónde apareció ese plano con once torres. “Eso está en investigación y ya la entidad encargada de hacer las averiguaciones está alertada sobre el asunto”.

No obstante, la versión del arquitecto se contradice con la información publicada en la página web de la constructora donde se ofrecen las once torres en venta. Con ese propósito, dice el portal, “Remanso de la Colina está considerado en tres etapas así: etapa 1, construcción de 4 torres de 48 apartamentos... Etapa 2, construcción de 3 torres de 36 apartamentos y Etapa 3, construcción de 4 torres de 48 apartamentos”. También se ve claro en la fotografía aérea que se acondicionaron las once terrazas.

¿Y quién controla?

En medio de las presuntas irregularidades relacionados con el proyecto, lo que más sorprende a quienes residen en este sector de la Comuna 22 es que mientras las autoridades se responsabilizan unas a otras, el proyecto avanza como si nada ocurriera.

El País  conoció un único reclamo donde la subdirectora de Ordenamiento Urbanístico de Cali, María Virginia Borrero, se dirige al curador Urbano No.1, Fernando Acosta, y lo acusa de actuar “totalmente contrario a la norma urbanística” y le pide explicar por qué no certificó la legalidad de los documentos que le entregó el constructor.

Igualmente, cuestiona por qué expidió una licencia de construcción con un dirección errada, por qué aprobó un proyecto donde el 50% de su desarrollo está en área rural y otra parte en régimen diferido y cómo entregó la licencia sin que el constructor desafectara las vías públicas, cuando era obligación en el esquema básico SOU-6701-DAP-2012.

La abogada de la Curaduría No.1, Margarita Rosa Banguero, indicó que ellos solo expiden las licencias de construcción “de acuerdo a los usos solicitados y a la información que nos da el Municipio, que es quien ejerce el control a través de Planeación. Lo único que nosotros hicimos fue modificar la licencia de acuerdo a los requerimientos que nos hizo Planeación”.

Al asegurar que la Curaduría actuó en el marco de la ley y que si hubo alguna irregularidad es el constructor quien debe responder, la abogada reiteró que si deben comparecer por alguna anotación sobre el proyecto lo harán “con base en los documentos que nos allegaron para el tramite de la licencia donde todas las autorizaciones estaban ahí dadas”. 

Sin embargo, no es cierto que las autorizaciones estén dadas porque la nueva licencia, expedida el pasado 4 de febrero y en la que se vuelve al número de siete torres, no tiene los permisos ambientales según Dagma, CVC y el propio constructor, quien dijo que hizo el trámite pero no le han dado respuesta.

“¿Cómo se va a solucionar el problema si las torres están en el mismo lugar; ocupando espacio público y sobre zona de régimen diferido? O que nos digan cómo y cuando movieron las torres”, preguntan vecinos de la obra.

Recientemente entró como nuevo actor a esta ‘película’ la Personería de Cali, que le pidió mediante oficio 220-10-1/1550 a la CVC que haciendo uso de su potestad preventiva “ordene la suspensión indefinida de la licencia de urbanización” para evitar “un daño irremediable” al patrimonio ambiental, pero en su respuesta la Corporación señala que ya cursa un proceso sancionatorio, que no es potestad de ellos parar la obra y le pide dirigirse a otra autoridad porque ellos tampoco son los competentes.

Nadie sabe de dónde apareció el segundo plano La Subdirección del POT dio concepto favorable al constructor en  marzo del 2014 para  construir  siete torres, según el plano 2/14. Pero en la segunda imagen se ve el plano 2/14 autorizando el levantamiento de once torres, de las cuales cuatro están en zona protegida; aún así, la Curaduría No.1 otorgó la licencia. [[nid:407017;http://contenidos.elpais.com.co/elpais/sites/default/files/imagecache/563x/2015/03/planos-conjunto-remanso.jpg;full;{En la izquierda el plano original, y a su lado el plano alterado.}]] 

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