El Eje Cafetero se mantiene como una de las regiones más atractivas para el turismo en Colombia, gracias a sus montañas, su riqueza cultural y la identidad cafetera que caracteriza a Caldas, Risaralda y Quindío.
En este último departamento se encuentra Buenavista, un municipio que, pese a ser el menos poblado de la región, con poco menos de 3000 habitantes, concentra algunos de los paisajes más imponentes de la región.
Un pueblo de raíces cafeteras
Como muchos municipios de la zona, Buenavista nació durante la colonización antioqueña.
José Jesús Jiménez “viajó desde Vahos a colonizar las tierras del sur del viejo Caldas con un grupo de colonos de diversas regiones del país, se instaló en 1927 en las colinas de la cordillera central. Allí comenzó a sembrar y a asentarse en el territorio que declaró su fundación seis años más tarde, en 1933″, señala al respecto el portal Paisaje Cultural Cafetero citado por Semana.
En 1967, Buenavista fue elevado a la categoría de municipio y, con el paso del tiempo, se consolidó como un pequeño centro de producción y comercio de café y otros cultivos tradicionales de la región, como cítricos, plátano y banano.
Panorámicas únicas del Paisaje Cultural Cafetero
Ubicado a 1477 metros sobre el nivel del mar y a 29 kilómetros de Armenia, Buenavista ofrece vistas amplias y espectaculares. En 2011 fue declarado por la Unesco como patrimonio de la humanidad.
Tal como indica el portal Paisaje Cultural Cafetero, el municipio hace honor a su nombre: desde distintos miradores y puntos del casco urbano es posible observar extensos ecosistemas, montañas y cultivos que dominan la región.
Su entorno natural se complementa con la arquitectura típica de los pueblos cafeteros, donde las fachadas coloridas y los balcones floridos acompañan el ritmo tranquilo de la vida local.
Tradición, cultura y café
Además de su riqueza paisajística, Buenavista es reconocido por mantener viva la cultura cafetera.
Uno de sus principales eventos es la feria de cafés especiales Expocafé Cordillera, una celebración en la que sus habitantes reciben a turistas y compradores entre actividades culturales, muestras gastronómicas y recorridos por fincas cafeteras.
Durante este encuentro, los visitantes pueden disfrutar de la “privilegiada buena vista”, según destaca el portal, rodeados de plantaciones de café, naranjos, limoneros y extensos cultivos de plátano.
Un destino para el turismo de aventura
El municipio también se ha convertido en un referente para quienes buscan actividades de aventura.
En el Cerro de las Tres Cruces se practica parapente, una de las experiencias más destacadas de la zona.
De acuerdo con el sitio especializado Rutas del Paisaje, “existen pocos lugares en Colombia que ofrezcan una experiencia de vuelo en parapente similar a la que se puede encontrar en Buenavista. No todos los destinos de aventura ofrecen la posibilidad de admirar un lugar declarado patrimonio de la humanidad desde las altura”.