Los parásitos intestinales, también conocidos como helmintos o gusanos intestinales, son organismos que viven en el sistema digestivo humano y se alimentan de los nutrientes que ingieren las personas. Estos parásitos pueden variar en tamaño y forma, pero todos comparten la característica de depender del huésped para su supervivencia y reproducción.

Estos microorganismos residen en el intestino humano, donde se adhieren a las paredes intestinales y se alimentan de los nutrientes que se consumen. Pueden ser gusanos planos (tenias) o redondos (nematodos) y pueden causar una variedad de problemas de salud.

La infección por parásitos intestinales se produce principalmente debido a la ingestión de huevos o larvas presentes en alimentos, agua o suelo contaminados y algunos síntomas frecuentes incluyen:

  • Dolor abdominal y cólicos.
  • Diarrea o estreñimiento.
  • Náuseas y vómitos.
  • Fatiga y debilidad.
  • Pérdida de peso inexplicada.
  • Picazón anal.
  • Anemia en casos severos.

La frecuencia con la que pueden llegar a presentarse estas infecciones han llevado a que muchas personas sean más rigurosas en algunas prácticas de higiene en todos los sentidos, pero especialmente a la hora de preparar alimentos. Agua no potable, alimentos no lavados, mal cocidos o la contaminación cruzada son focos importantes de parásitos intestinales.

Los parásitos intestinales son un problema de salud común que puede tratarse de manera natural. | Foto: Libre de derechos

Pero aparte de estas medidas de prevención, están también las preparaciones y los remedios caseros que, a partir de productos naturales, se pueden usar para combatir estos parásitos y en el último tiempo se ha vuelto popular un elemento que comúnmente es desechado a la hora de consumir la fruta: las semillas de papaya.

Estos componentes son ricos en diversos compuestos bioactivos que contribuyen con sus propiedades medicinales, especialmente a la salud digestiva. Por ejemplo, los carbazoles, uno de sus principales compuestos, exhiben propiedades antibacterianas y antiparasitarias, que podrían ayudar a combatir infecciones intestinales.

La papaya aporta vitaminas a la piel que ayudan a mantenerla saludable. | Foto: Pexels

De igual manera, la semillas contienen fitonutrientes como flavonoides y fenoles, que tienen propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, además de enzimas proteolíticas como la papaína, que puede ayudar a descomponer las proteínas y mejorar la digestión. La fibra presente en las semillas promueve la salud intestinal y previene el estreñimiento.

Para usar con fines digestivos las semillas de papaya es necesario extraerlas de la fruta fresca, secarlas al sol y luego molerlas para obtener un polvo fino. La dosis varía según la edad y el estado de salud. En general, una cucharadita de polvo de semillas de papaya puede ser una dosis inicial.

El polvo se puede consumir directamente o mezclarse con alimentos como yogurt o batidos, aunque algunas personas pueden encontrarlas bastante desagradables para consumir por su sabor amargo y fuerte. Por eso se recomienda comenzar con una pequeña cantidad para adaptarse al sabor.

La dosis adecuada de semillas de papaya para combatir los parásitos intestinales puede variar según la persona, su salud y otros factores. No existe una dosis estándar única que funcione para todos. Sin embargo, se recomienda mantener algunas prácticas como su frecuencia (se puede empezar con una pequeña dosis al día), aumento gradual (puede incrementarse la dosis dependiendo de la reacción del organismo), y aunque no existe un consenso claro sobre la duración óptima del consumo, algunas personas eligen usarlas durante uno o dos ciclos de una semana y luego hacer una pausa.

Antes de usar semillas de papaya o cualquier otro remedio herbal, es importante consultar con un profesional de la salud. Las semillas pueden no ser adecuadas para todas las personas y pueden tener interacciones con medicamentos o condiciones médicas existentes.

La papaya tienen propiedades antibacterianas o antiinflamatorias. Foto: Getty images. | Foto: Getty images

Aparte de los beneficios antiparasitarios, las semillas de papaya también son conocidas por sus propiedades para el bienestar de diferentes órganos por su alto contenido de antioxidantes, así como para la salud cardiovascular, el cuidado de la piel y la salud reproductiva.