Tras conocerse la decisión de la Corte Constitucional, referente al trámite de la reforma pensional aprobada en la Cámara de Representantes el año pasado, el Congreso está obligado a rehacer este último debate con el fin de subsanar los vicios que tuvo el proyecto.
En ese sentido, el ministro del Interior, Armando Benedetti, aseguró que el Gobierno convocará al Congreso a sesiones extras antes del 20 de julio, que es cuando termina el actual periodo legislativo.
“Es importante que no se haya hundido la reforma pensional en la Corte Constitucional y que la hayan enviado de nuevo a la Cámara para que se discuta más y que haya más debates”, opinó en primera instancia el jefe de la cartera política.
Luego explicó que “el presidente de la República, a través del Ministerio, convocará a extras a la Cámara para que se discuta y se den los respectivos debates para que sea ley de la República, porque debe empezar a partir del primero de julio”, afirmó el jefe de la cartera política en declaración a medios de comunicación.
Al mismo tiempo, señaló que él y su equipo ya empezaron a trabajar en la realización del decreto para la convocatoria, el cual se daría a conocer en las próximas horas. También dejó en claro que la decisión del alto tribunal no se trata de un hundimiento, sino que se haga la última discusión para que la reforma pensional sea declarada constitucional.
Por su parte, el presidente Gustavo Petro se pronunció sobre la decisión de la Corte Constitucional.
“La reforma pensional se ha salvado. Le solicito a la Cámara de Representantes discutir a fondo el artículo que aprueba el texto del Senado y aprobarlo. La Cámara ha sacado la cara por las reformas sociales del gobierno y del pueblo, y el Senado, con leve mayoría, comienza a reaccionar a favor”, expresó el jefe de Estado a través de su cuenta de X (antiguo Twitter).
Aunque la Corte encontró que sí hubo vicios de procedimiento en la aprobación de la reforma pensional, porque no se dio al proyecto el suficiente debate, determinó que este es un vicio subsanable y, por ende, devolvió el proyecto a la Cámara para que lo haga.
“Solo correrá cuando el Congreso de la República se encuentre en sesiones ordinarias, a menos que sea convocado para ello en sesiones extraordinarias. Este término no cobija el trámite de conciliación ante las dos cámaras legislativas, en caso de que sea necesario recurrir a dicha instancia legislativa. De ser el caso, el trámite de la conciliación deberá surtirse en el término máximo de una legislatura”, explicó la corporación judicial sobre el trámite que se debe hacer para que la reforma pueda ser aprobada en su totalidad.
La nueva Ley de la República no podrá entrar a regir el 1 de julio, como estaba previsto, sino que se aplazará su entrada en vigencia.