El Congreso de la República cierra el 2019 como uno de los protagonistas del año. No solo fue el escenario de sendos hechos políticos como mociones de censuras a ministros, sino que su naturaleza de órgano legislador lo tiene en boca de miles de colombianos por la reciente aprobación de la reforma tributaria o Ley de Crecimiento, uno de los temas que más movió la aguja del país en las últimas semanas.
Al cierre de este periodo de sesiones, el presidente del Senado, Lidio García Turbay, hace el balance de cómo se movió el Congreso políticamente y cómo le fue al Gobierno Nacional en cuanto a proyectos de ley e iniciativas lideradas y aprobadas y también en cuanto a la llamada “nueva forma de relacionarse” con los parlamentarios, en la que que tanto ha insistido el presidente Iván Duque.
García, quien es militante del Partido Liberal, considera que muy pronto el Mandatario de los colombianos deberá dar un cambio en varios de sus ministros, porque c.ada vez le es más difícil tener mayorías en el Congreso de la República y lograr la gobernabilidad necesaria para aprobar proyectos fundamentales para él y su plan de gestión.
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¿Cuál es su balance de las relaciones entre el Gobierno Duque y el Congreso de la República?
Es un nuevo estilo de hacer política, de relacionarse con el Legislativo y eso, de una u otra manera, ha generado algún impacto en la sociedad colombiana, en la política nuestra, en la misma institucionalidad del Congreso y en el manejo político, porque el Presidente necesita gobernabilidad y esta se hace haciendo política, invitando a los sectores a que acompañen un gobierno a sacar adelante primero su programa y las crisis que se presenten.
¿Por qué cree que al Gobierno del presidente Duque no le ha ido bien con sus proyectos en el Congreso de la República?
Porque no tienen unas mayorías contundentes y porque no se han puesto a hacer política. Para gobernar hay que hacer política y el presidente Duque tiene un estilo muy particular, que a su modo de ver y entender piensa que le ha dado resultado. Yo pienso que de cierta manera sí, pero cada día es más difícil. Un gobierno necesita tener mayorías, necesita tener gobernalidad. La gobernabilidad no es ‘mermelada’.
En ese orden de ideas, ¿año nuevo, cambio de gabinete inminente?
Indudablemente creo que el presidente Duque debiera darle un nuevo aire a su equipo de trabajo. Sinceramente veo la necesidad de tener personas que conozcan un poco más del manejo de lo público y lo político.
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Entonces, ¿se rajaron los actuales ministros?
Hace unos días dije: ‘no me pongan a decir quiénes son los buenos porque se sabe quiénes fueron los malos’. No quiero dar nombres, pero todos en el país saben quiénes son y cómo han hecho la tarea.
¿Y si el presidente Duque nombra a Simón Gaviria como ministro habría algún cambio de postura del liberalismo frente al Gobierno?
Nunca hemos estado en contra del Gobierno Duque, jamás. Nosotros lo único que no le hemos votado es la reforma tributaria y las objeciones a la Jurisdicción Especial para la Paz. De resto, hemos apoyado al Gobierno Nacional en todo, sin estar como partido de Gobierno y sin estar pendientes de puestos.
Si mañana hay una hoja de vida como la de Simón Gaviria u otro liberal que pueda apoyar al Gobierno Nacional, pues bienvenido, pero nuestra postura es clara y nuestro ideario político también.
¿Definitivamente decidieron votar no a la reforma tributaria en el liberalismo?
Nosotros votamos todo negativo, no apoyamos la reforma tributaria y fue una decisión mayoritaria en la colectividad.
Está muy polarizado el ambiente actualmente en el Congreso. ¿A qué cree que se debe?
Este es un Congreso distinto, llevo trece años en la corporación y nunca he visto un Congreso tan difícil. La polarización política en la que está subida hoy Colombia es la que ha generado enfrentamientos difíciles. Con distintas posiciones y distintos pensamientos es muy difícil manejar la plenaria, pero creo que esa es la democracia nuestra, y creo que aquí todo el mundo tiene derecho a criticar, si lo hace de buena manera y con respeto.
¿En qué cree que va a terminar el tema de las curules transitorias para las víctimas en la Cámara de Representantes tras la insistencia de que sean validadas?
Yo tengo un criterio y me baso en argumentos jurídicos: no puedo hacerlo porque el Presidente de la República lo quiera o alguien así lo desee. En mi caso, estoy convencido de que las víctimas deben tener un espacio, pero de forma clara, que no tropiece con lo legal. Haremos un análisis jurídico de si se puede o no y entonces veremos qué definimos.
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¿En su opinión el Congreso sí atendió el llamado de los colombianos que han salido en estas últimas semanas a protestar a las calles?
En todo este tema de la crisis, por primera vez en 40 años recibimos en el Congreso de la República a todos los sindicatos y a los líderes de la protesta social y eso es una demostración de que le dimos la cara a la problemática nacional. Acá le seguiremos abriendo las puertas a todos, es es darle cara a la crisis.
¿Pero en concreto en qué atenderá el Congreso de la República las peticiones de los promotores del paro nacional?
No podemos hacer sino servir de facilitadores, fue lo que hicimos en la mesa donde trabajamos y recibimos a los líderes del paro. Ponemos a su disposición, para solventar la crisis, nuestra facilitación y la decisión legislativa que las partes puedan necesitar para solventar la crisis que actualmente enfrenta el país.