El primer esfuerzo que debe hacer la Gobernación del Valle para trasladar al 40% de sus jubilados a Colpensiones es pagar los bonos pensionales.Con ello cumpliría lo dispuesto en el Decreto 1314 de 1994, que obliga a las instituciones del Estado a entregar a la entidad pensional la parte cotizada por sus empleados, como requisito para que estos puedan ser trasladados al régimen de prima media.Y sería la oportunidad para depurar la lista de pensionados, saber en verdad cuántos son y si se están haciendo pagos a personas inexistentes, una investigación que se viene pidiendo de tiempo atrás.Hoy la carga pensional del Departamento representa el 60% de sus gastos de funcionamiento, y al trasladar al 40% de sus jubilados a Colpensiones ahorraría cerca de $100.000 millones anuales.Un buen principio para darle tranquilidad a las finanzas regionales.