Durante los dos años y cinco meses en que estuvo al frente de la Secretaría de Tránsito, Alberto Hadad demostró que cuando se ejerce el principio de autoridad es posible devolverle el orden a la movilidad de una ciudad.Una línea que se debe continuar en la dependencia, para que los caleños sigan cumpliendo las normas, el orden siga ganando espacio y Cali sea más vivible.El relevo no debe ser obstáculo para seguir trabajando el la solución a los problemas que aún se presentan en el sistema de transporte para la ciudad.Y se continúe con la labor de depuración de la Secretaría para lograr la transparencia que reclaman los ciudadanos.Con autoridad, educación en cultura ciudadana y cumplimiento de las normas de tránsito Cali logrará mejorar su movilidad y tendrá herramientas esenciales para la convivencia.