La renuncia del alcalde de Sevilla, Gerardo Gómez Díez, es el corolario de una serie de episodios oscuros e irregularidades que han ocurrido en este municipio vallecaucano.Acusaciones contra el burgomaestre por corrupción, clentelismo e irregularidades en la celebración de contratos y una serie de hechos violentos, como el asesinato de un candidato a la Alcaldía y el crimen, en enero pasado, del hermano y la cuñada de Gómez Díez, han generado intranquilidad en ese municipio. Hechos muy graves ante los cuales las autoridades de Policía y la Justicia han guardado silencio.Los sevillanos y el resto del país necesitan saber con certeza qué está ocurriendo en esa ciudad.Por ello es necesario que se investiguen y sancionen hechos que han radicalizado el ambiente político y han llenado de zozobra a la llamada capital cafetera de Colombia.