Al Aeropuerto de Santa Ana en Cartago no se le ha reconocido su potencial ni su importancia para la región.Por fortuna ahora se acordaron de él y se realizaron obras de adecuación en la sala de pasajeros, se renovaron las bodegas y se mejoró la plataforma.Un buen comienzo después de que el Santa Ana estuvo en el abandono durante una década y con operación esporádica de tráfico aéreo.Por su ubicación estratégica en el norte del Valle, por su cercanía a las capitales del Eje Cafetero y por las condiciones del clima en la zona, el de Cartago debería ser el aeropuerto alterno de la región.Ojalá con las inversiones hechas y con las promesas de integrarlo a una concesión de varios aeropuertos regionales, se le dé al Santa Ana el impulso que merece, para beneficio de quienes viven en el norte del Valle y en los departamentos cercanos.