La divulgación de los llamados ‘papeles de Panamᒠdeja a muchas personas importantes, entre ellos varios colombianos, con la obligación de dar explicaciones.La clave del asunto son los documentos de la firma panameña Mossack Fonseca, especializada en crear empresas ‘offshore’, es decir aquellas registradas en países donde no realizan ninguna actividad económica.Las posibilidades de que a través de su intervención se hayan constituido compañías para lavar dineros provenientes de negocios ilícitos, o con el fin de evadir impuestos, es alta.Pero también se debe presumir que no todas las 200.000 empresas conformadas en 40 años de labores de la firma hayan tenido fines ilegales.El trasfondo oscuro no se puede negar, como lo ratifica la renuncia del Primer Ministro de Islandia, implicado en el asunto, o los problemas judiciales de la firma de abogados en Brasil, donde varios de sus empleados están encarcelados por los escándalos de corrupción.Ahora se especula sobre los alcances de los once millones de documentos en los que se involucran mandatarios, políticos, dirigentes deportivos, futbolistas, artistas y personajes relacionados con las mafias, entre otras actividades. Muchos tendrán que dar explicaciones, además de la aclaración sobre quién y con qué intención filtró la información. Y de nuevo se habla de hasta dónde la confidencialidad sobre la información financiera en países como Panamá, uno de los paraísos fiscales del mundo, puede usarse para hacer trampa, esconder dineros o evadir impuestos.