Las imágenes de la Laguna del Pondaje que publicó el fin de semana este diario, muestran el daño que los caleños le están ocasionando a una de las zonas reguladoras de agua de la ciudad por cuenta de la mala disposición de las basuras.Son permanentes las advertencias que se hacen sobre el desastre que pueden ocasionar los desperdicios, sin que nada convenza a la gente de su responsabilidad.Mientras se sigan arrojando escombros de toda clase y tamaños a los canales de aguas lluvias terminarán obstruyendo los desagües y llegarán a las lagunas de regulación como la del Pondaje, ocasionando su taponamiento y provocando inundaciones ante la menor lluvia.Por eso, tan importante como las sanciones que se les imponen a quienes arrojan basuras, es que se eduque a los caleños y se promueva un cambio cultural que lleve a la gente a respetar su ciudad y a saberla cuidar.