Lo ideal en una fecha como la llegada de un nuevo año es que no se presente ningún hecho violento.Por eso, se espera que mañana los caleños festejen con alegría y tranquilidad y que la tolerancia impere durante el fin de semana.Así podrá demostrarse que la reducción del 47% de homicidios en las celebraciones navideñas no es un hecho aislado y que sí es posible cambiar las riñas por la convivencia.La tendencia es producto de los esfuerzos de la Fuerza Pública y las autoridades municipales por perseguir las bandas y al crimen organizado, así como del propósito de los caleños por vivir en paz.Que la bienvenida del 2016 sea una celebración sana y alegre depende del buen comportamiento de los caleños y del consumo moderado del licor.Porque, así como los controles son necesarios lo que garantiza una fiesta pacífica es el respeto a los vecinos y la convivencia civilizada.