Luego de varios meses de que se conociera uno de los casos que más polémica causó al interior del circulo petrista, luego de que se revelara que Laura Sarabia, en aquel entonces mano derecha del presidente Gustavo Petro, hubiera sometido a chuzadas a Marelbys Meza, quien trabajaba para ella como niñera, hoy el Juzgado 53 Penal del Circuito de Conocimiento de Bogotá hizo públicas las condenas a quienes estuvieron en este hecho.
Se trata del capitán Carlos Andrés Correa, quien fue condenado a 136 meses de prisión (el equivalente a 11 años), además de una multa de 400 salarios mínimos mensuales vigentes y una inhabilitación de 161 meses para el ejercicio de derechos y funciones públicas; y del patrullero Jhon Fredy Morales, quien fue sentenciado a 146 meses de prisión (el equivalente a 12 años), junto con una multa de 400 salarios mínimos mensuales vigentes y 175 meses de inhabilitación para el ejercicio de funciones públicas.
Según el ente investigador, los acusados fueron hallados culpables de los delitos de fraude procesal, falsedad ideológica en documento público y violación ilícita de comunicaciones, todo con ocasión de las chuzadas a Marelbys Meza.
La investigación estableció que los uniformados presentaron informes y datos falsos, lo que autorizó a que fiscales y jueces del Chocó autorizaran interceptaciones a las comunicaciones de Meza y de su compañera de trabajo, Fabiola Perea.
La Fiscalía probó que ambos uniformados fueron claves en la redacción de los documentos con datos ficticios que sirvieron de base a dichos fiscales y jueces a la hora de autorizar las chuzadas a los teléfonos de las trabajadoras de Laura Sarabia, quien en la actualidad ocupa el cargo de embajadora de Colombia ante el Reino Unido.
En tales informes, Meza habría sido identificada con el alias de ‘La madrina’, mientras que Fabiola Perea fue conocida como ‘La Cocinera’; supuestamente ambas estaban relacionadas con la estructura criminal del Clan del Golfo.
Frente a esto, la juez que llevó el caso aseguró que “el contraste entre el contenido consignado en estos documentos y la prueba testimonial y técnica recaudada en este juicio es concluyente. Mientras los formatos y el informe de campo presentaban a dos mujeres como integrantes de una estructura armada, la realidad evidenció que en juicio eran trabajadoras dedicadas a oficios ordinarios en Bogotá y Soacha, completamente ajenas a los hechos allí relatados”.
El hecho ocurrió luego de que en el departamento de Laura Sarabia desapareciera una maleta que contenía dinero, razón por la cual se hicieron estas tretas con el fin de investigar a Meza y a Perea, quienes fueron las primeras sospechosas. Cabe añadir que, en su momento, Marelbys Meza llegó a ser llevada incluso al polígrafo.