Varios sujetos, armados, secuestraron al abogado Óscar Eduardo Jordán Camacho, defensor público del programa de víctimas de la Defensoría del Pueblo del circuito de Santander de Quilichao, Cauca.
La retención del funcionario se presentó en la mañana de este lunes, 15 de septiembre, cuando la víctima llegó a un parqueadero del municipio de Caloto donde guardaba o estacionaba su vehículo.
Momentos antes había salido de su residencia, esto como forma de iniciar sus labores. En ese momento fue interceptado por los sujetos que después procedieron a llevárselo con rumbo desconocido.
“En el vídeo se observa que varios sujetos, portando fusiles, llegaron al parqueadero cuando el abogado se disponía a retirar un vehículo, luego se le acercaron para después obligarlo a subirse a un automotor que aguardaba en el sitio. Posteriormente, emprendieron la huida al parecer hacia la zona montañosa”, indicaron las autoridades.
Registrado el hecho, los testigos alertaron tanto a los familiares como a la Policía, de ahí que varios integrantes de esta institución llegaron al sitio de los hechos para obtener vídeos de cámaras de seguridad que ahora son clave para la investigación de este caso. Esta última actividad es adelantada o liderada por funcionarios del Gaula de la Policía.
Después se conoció que el funcionario, oriundo del municipio de Caloto y con trayectoria en la Procuraduría General de la Nación, es ampliamente reconocido en la región por su labor en la defensa de víctimas. Además, es profesional en Derecho de la Universidad Santiago de Cali.
Posteriormente, la Defensoría del Pueblo rechazó el secuestro de su funcionario, quien integra el programa de representación de víctimas del circuito de Santander de Quilichao.
“Óscar Eduardo Jordán fue secuestrado en el municipio de Caloto, Cauca, cuando hombres armados lo retuvieron a las afueras de su casa, ubicada en el barrio La Unión de esa población. Este hecho constituye una grave infracción al Derecho Internacional Humanitario, pues atenta contra la vida, la libertad y la integridad personal de un servidor público cuya labor es garantizar el acceso a la justicia y la protección de los derechos de las víctimas en el norte del Cauca, una de las regiones más golpeadas por el conflicto armado”, indicaron desde la Defensoría del Pueblo.
Ahora, entonces, familiares, comunidad y autoridades adelantan labores para dar con su paradero. La Defensoría del Pueblo y organizaciones sociales hicieron un llamado urgente a sus captores para que respeten su vida e integridad y permitan su liberación inmediata.