Restablecieron el paso de vehículos entre las ciudades de Popayán y Pasto, luego de que un grupo armado al margen de la ley, al parecer disidencias de las Farc, dejara abandonado un cilindro sobre un costado de esta vía.
Las personas, al ver este elemento, pensaron que estaba acondicionado con explosivos, pero la intervención del Ejército permitió establecer que no existía una amenaza relacionada con ataques u hostigamientos.
Y es que la emergencia fue reportada por los conductores que en la tarde de este viernes, 22 de agosto, se movilizaban por este tramo de la Panamericana. Luego, y con el fin de evitar afectaciones a los ciudadanos, las autoridades ordenaron el cierre de la carretera.
“Busco llegar a Popayán tras salir de La Vega, pero cerca al municipio de Rosas me encuentro con semejante trancón, claro, después de varias horas nos informan sobre la existencia de posibles explosivos sobre la carretera y que el Ejército, mientras atiende la situación, cerró un amplio tramo, de ahí la larga fila de buses, automóviles, mulas y motociclistas”, expresó Amalia Solarte, comerciante de la capital del Cauca.
Por eso, tras recibir el reporte de los conductores, a este punto de la carretera internacional arribaron varios soldados, quienes al percatarse de la existencia de este cilindro pidieron ayuda del experto en el manejo de explosivos, con el fin de contrarrestar esta amenaza.
“La emergencia se presenta cerca al puente sobre el río Quilcacé, tramo de la Panamericana entre Timbío y Rosas, ahora debemos esperar qué resultado arroja el trabajo del explosivista, si en verdad es un cilindro bomba o solo un elemento dejado en este punto de la carretera para causar temor entre los conductores”, explicaron militares que ahora están en el Cauca, enfrentándose a los grupos armados al margen de la ley, especialmente las disidencias de las Farc.
Después, cuando verificaron que el cilindro no contenía explosivos, los militares ordenaron restablecer el paso de vehículos por este punto de la Panamericana.
De hecho, y aunque no hay un pronunciamiento oficial de esta situación, la misma está asociada a posibles retaliaciones de los insurgentes liderados por alias Iván Mordisco, luego que el Ejército y la Policía ejecutaran la operación Perseo II en la vereda Honduras del corregimiento de Huisitó, zona rural del municipio de El Tambo, Cauca.
En esta intervención, adelantada el pasado martes 19 de agosto, los más de trescientos soldados y policías que llegaron a este punto del departamento incautaron gran cantidad de munición, explosivos y otra clase de elementos de guerra, toda vez que lograron desmantelar uno de los centros logísticos del frente Carlos Patiño de las Farc.
De ahí que ahora las autoridades están en máxima alerta ante posibles ataques por parte de los integrantes de este grupo armado al margen de la ley en el suroccidente colombiano, por lo que en ciudades como Popayán se reforzaron los operativos de control por parte de la fuerza pública.