Una nueva ofensiva contra la Fuerza Pública se registró en la mañana de este lunes, en la convulsa región del Catatumbo, donde una patrulla del Ejército fue atacada con explosivos lanzados desde drones. La acción violenta dejó tres militares muertos y ocho más heridos en la vereda Santa Rita, del municipio de El Carmen, Norte de Santander.

Según los reportes preliminares, el hecho ocurrió mientras uniformados del Batallón Energético y Vial N.º 10 realizaban labores de patrullaje y vigilancia en zona rural. En ese momento fueron sorprendidos por artefactos explosivos arrojados desde vehículos aéreos no tripulados, en una modalidad de ataque que se ha venido repitiendo en la región.

Según los reportes preliminares, el hecho ocurrió mientras uniformados del Batallón Energético y Vial N.º 10 realizaban labores de patrullaje y vigilancia en zona rural. | Foto: Ejercito Nacional

Los soldados heridos fueron estabilizados en el lugar por personal médico de la unidad militar y posteriormente evacuados para recibir atención especializada. El Ejército espera su traslado aéreo a Cúcuta, donde serán atendidos en centros hospitalarios de mayor complejidad.

Aunque en un inicio ninguna organización se atribuyó el ataque, las autoridades apuntan al Ejército de Liberación Nacional (ELN) como principal sospechoso. La guerrilla mantiene presencia activa en ese sector del país y ha sido responsable de hechos similares ocurridos en los últimos meses.

En lo que va del año, más de tres ataques con drones cargados de explosivos han sido ejecutados contra tropas del Ejército en municipios como Teorama, Tibú y El Tarra. En total, al menos cinco militares han muerto y varios más han resultado heridos en esta serie de ofensivas.

Uno de los episodios más recientes ocurrió el pasado 13 de julio, cuando dos soldados resultaron heridos en Bellavista, El Tarra. El uso de drones como herramienta ofensiva ha generado alarma entre defensores de derechos humanos, al considerarse una práctica que viola el Derecho Internacional Humanitario.

Uno de los episodios más recientes ocurrió el pasado 13 de julio, cuando dos soldados resultaron heridos en Bellavista. | Foto: Francisco Calderón

De acuerdo con la organización Vivamos Humanos, esta táctica representa un cambio significativo en la dinámica del conflicto armado, especialmente en zonas rurales donde los grupos armados disputan el control territorial.

La cifra de miembros de la Fuerza Pública asesinados en el Catatumbo supera los 18 casos en lo corrido del año, lo que confirma el deterioro en materia de seguridad en esta región fronteriza con Venezuela, marcada por la confrontación entre el ELN y disidencias de las FARC.

Frente al nuevo ataque, las autoridades militares han desplegado operativos en la zona para ubicar a los responsables del hecho, mientras se refuerzan los dispositivos de seguridad en los corredores estratégicos del Catatumbo. Por ahora, la preocupación aumenta ante la sofisticación de los métodos usados por los actores armados ilegales y la creciente vulnerabilidad de las tropas en terreno.