El lamentable suceso ocurrió cuando un trabajador de uno de los ingenios azucareros ubicados en el Valle del Cauca se resistió a lo que presuntamente fue un atraco en el momento en el que el hombre desempeñaba sus labores como guardavías.

Sorprendido por hombres fuertemente armados, el hombre, que se desempeñaba como guardavías, no tuvo forma de evitar el robo de sus pertenencias, y mucho menos las circunstancias de violencia que dieron con su muerte.

Según Asocaña, la caña de azúcar, es el gran motor de la economía en el Valle del Cauca. Este sector mueve el 0,7 % del PIB de Colombia, mueve 180.000 empleos. Hay 13 ingenios azucareros en la región, seis de ellos tienen plantas de bioetanol. Foto Jorge Orozco / El País. | Foto: El País

El atraco ocurrió en la vía que conecta a El Cerrito y Palmira. A pesar de que el hombre fue trasladado hasta el Hospital San Rafael, ubicado en el municipio de El Cerrito, los profesionales de la salud no pudieron hacer nada para salvar su vida, pese a los intentos que realizaron.

“Desde Providencia cosecha rechazamos los hechos de violencia ocurridos en la noche de ayer en contra de nuestros trabajadores”, dijo, por medio de un comunicado, el ingenio para el que laboraba el hombre asesinado. Añadieron que desde Providencia se acompaña a sus familiares en este difícil momento y se les envía las más sentidas condolencias a familia y compañeros de trabajo.

En ese mismo sentido, el ingenio hizo un llamado a las autoridades, para que de manera inmediata inicien las respectivas investigaciones con el propósito de esclarecer lo sucedido y ubicar a los responsables del crimen lo más pronto posible.

Por su parte, la policía del departamento del Valle aún no se ha pronunciado de manera oficial sobre el caso.

Cabe añadir que este tipo de casos se han convertido en fuente de preocupación para los ingenios, pues dada la remota ubicación en que se encuentran algunos de sus trabajadores es mucho más probable que sean víctimas de intentos de hurtos por parte de bandas delincuenciales locales, especialmente en sectores cooptados por grupos al margen de la ley.

Ingenio Providencia, cultivos de caña, programas de sostenibilidad. | Foto: El País

Estos hechos de violencia se han intensificado en los últimos años, debido a los intentos por parte de grupos indígenas, afros y campesinos, quienes intentan apropiarse de terrenos que, aseguran, les pertenecen por cuestiones de arraigo histórico en los territorios.

Con esto presente, Asocaña ha realizado algunos proyectos pilotos, con el objetivo de que integrantes de estas comunidades puedan integrarse en el mercado por medio del cultivo de diferentes productos.

Debido a las bastas extensiones dedicadas al cultivo de la caña, esta y otras iniciativas buscan impedir que situaciones como esta sigan repitiéndose en las regiones.

Asocaña también rechazó el hecho e hizo un llamado urgente a las autoridades para que este crimen no quede en la impunidad.

Reiteramos la necesidad de garantizar condiciones de seguridad para quienes diariamente contribuyen con su trabajo al desarrollo económico y social de la región y de Colombia”, dijo el gremio a través de un comunicado.